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Resolver los crecientes retos de la congestión vial requiere soluciones integrales que mejoren la interacción de las personas con las ciudades.

La congestión vial es un desafío que va en aumento en todo el mundo y Costa Rica no es la excepción. A pesar de que en los últimos años se han concluido proyectos importantes de infraestructura vial, como la carretera de Circunvalación que finalizó su apertura en octubre de 2024, el problema de los embotellamientos persiste. 

Según datos de las Naciones Unidas se espera que para 2030, más de cinco millones de personas vivan en ciudades, lo que supone retos aún mayores para el transporte y la calidad de vida en las zonas urbanas.

“Aumentar la infraestructura vial puede aliviar momentáneamente la congestión, pero no es una solución sostenible porque, según la teoría de la demanda inducida, se genera un incremento proporcional en el uso de vehículos privados”, comentó Emma Grün, líder Regional de Ciudades y Diseño Urbano para Gensler Latinoamérica. Añadió que “diversos estudios demuestran que, en cuanto las carreteras se expanden, más personas prefieren usar sus autos, a menudo con un solo ocupante, alentadas por la percepción de que el viaje será más rápido y cómodo”.

Para abordar el congestionamiento vial, la experta señaló la importancia de soluciones más integrales que replanteen el diseño urbano: “Resulta fundamental conectar mejor las opciones de transporte público con los principales centros de vivienda, ofrecer más alternativas de movilidad y fomentar proyectos de uso mixto. Estos espacios combinan hospitalidad, comercio, deportes y residencias, de modo que las personas puedan realizar sus actividades cotidianas en un mismo lugar, reduciendo la necesidad de desplazarse y, a la vez, impulsando sistemas de transporte más eficientes”.

Movilidad para toda la población

Para que la planificación a través del diseño urbano sea efectiva en la misión de descongestionar las carreteras, debe estar respaldada por una gama de opciones de transporte, adaptadas a las características demográficas de la población. “Debemos contemplar distintas modalidades que se adecuen a la vida diaria de las personas: caminar, usar bicicleta o scooters eléctricos. Esto requiere diseñar zonas habilitadas y seguras para que cada uno pueda desplazarse con libertad”, manifestó Grün.

La experta explicó que numerosas investigaciones resaltan los beneficios de la actividad física vinculada al transporte activo en niños y jóvenes: “Ir caminando a la escuela, por ejemplo, mejora el rendimiento académico, la atención y el estado de alerta, además de elevar los niveles de felicidad y reducir el estrés”.

Para la líder Regional de Ciudades y Diseño Urbano para Gensler Latinoamérica, transporte público debe ser seguro y confiable. “Quienes lo utilizan ganan tiempo para leer, conectarse o simplemente descansar. Por eso, la meta es diseñar centros urbanos que reúnan diferentes opciones de transporte y, al mismo tiempo, ofrezcan soluciones para las diversas necesidades de las personas que habitan estos espacios”, concluyó. 


Acerca de Gensler
Gensler es una firma global de arquitectura, diseño y planificación. Cuenta con 55 oficinas y más de 6,000 profesionales conectados en Las Américas, Europa, Gran China, Asia Pacífico, y Oriente Medio. Fundada en 1965, la firma trabaja globalmente con más de 3,500 clientes en 33 áreas de práctica, que abarcan los sectores de trabajo, estilo de vida, ciudades y salud. Los equipos se guían por la misión de crear un mundo mejor a través del poder del diseño, la fuente de la fortaleza de Gensler es su recurso humano.  
Gensler Costa Rica es la oficina líder de la región latinoamericana, fundada en el 2005. Por más de 18 años ha diseñado proyectos de todas las escalas en más de 12 países, siempre creando sinergia con sus clientes, tanto públicos como privados, para generar un impacto positivo en cada proyecto.