
La iniciativa forma parte del proyecto “De Vuelta a Casa” y refuerza el compromiso ambiental del sector aeroportuario.
En el marco del proyecto ambiental “De Vuelta a Casa”, AERIS, gestor del Aeropuerto Internacional Juan Santamaría, organizó una jornada de voluntariado en la que participaron más de 70 colaboradores de la comunidad aeroportuaria. El objetivo fue separar las conchas marinas decomisadas en el aeropuerto, del resto de materiales no aptos para retornar al mar, en preparación para su futura clasificación y reintroducción a los ecosistemas marinos del país.
La actividad contó con la colaboración de personal de aerolíneas, operadores de servicio en tierra, concesionarios comerciales, el cuerpo de bomberos del aeropuerto y funcionarios del Órgano Fiscalizador y AERIS, quienes unieron esfuerzos en una muestra clara del compromiso del sector con la sostenibilidad y la conservación ambiental. En esta ocasión, se logró separar un total de 1.800 kilos de conchas, es decir, casi 2 toneladas. Esta cantidad corresponde a lo recolectado en el AIJS entre agosto de 2024 y marzo de 2025.
El gerente de Seguridad Operacional y Gestión Ambiental, Adriana Bejarano, señaló:
Nos complace profundamente la respuesta positiva que ha tenido esta jornada de voluntariado, lo que refleja el compromiso de la comunidad aeroportuaria con la problemática ambiental que se ha abordado a través de la campaña ‘De Vuelta a Casa’. Esta iniciativa ha logrado generar una conexión real con las personas, quienes se han sentido parte de la solución y han respondido con entusiasmo. Para AERIS, es muy valioso ver cómo este tipo de acciones nos permiten, como sociedad, aportar activamente a la protección y restauración de nuestros ecosistemas marinos”.
Esta jornada de voluntariado representa una fase fundamental dentro del proceso de retorno de las conchas marinas retiradas en el Aeropuerto Juan Santamaría. Tras ser separadas de otros materiales, las conchas serán clasificadas en los próximos meses por voluntarios de FIFCO, para luego ser devueltas al mar con el acompañamiento técnico y científico de las instituciones aliadas.
El proyecto “De Vuelta a Casa” es un esfuerzo conjunto entre FIFCO, AERIS, el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) a través del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC), y la Universidad de Costa Rica. Esta alianza interinstitucional busca revertir los impactos negativos generados por la extracción masiva de conchas marinas, una práctica que ha afectado gravemente los hábitats costeros y marinos del país.
José Pablo Murillo, Regional Head of Connections Marketing en FIFCO, explicó:
De Vuelta a Casa ha sido un proyecto muy bien recibido por toda Costa Rica, nos ilusiona ver cómo en conjunto estamos combatiendo esta problemática. Agradecemos a AERIS y a los 70 voluntarios por este gran apoyo, sin duda esta gestión nos acerca a la meta de Imperial y FIFCO de seguir protegiendo las playas del país”.
AERIS desempeña un papel clave dentro de esta iniciativa, al coordinar desde el aeropuerto el manejo adecuado de las conchas marinas decomisadas. Su rol incluye la recepción, almacenamiento y entrega del material, asegurando su trazabilidad y garantizando que no se desechen, sino que puedan reintegrarse de forma segura a su entorno natural.
Además del trabajo logístico y operativo, el proyecto “De Vuelta a Casa” se apoya en soluciones tecnológicas innovadoras, como el uso de inteligencia artificial para la identificación y clasificación de conchas, lo que permite optimizar el proceso de retorno al mar y aumentar su efectividad.
Para AERIS, esta iniciativa representa un compromiso más allá de la gestión aeroportuaria. Como primer punto de contacto para miles de turistas que visitan el país, la empresa reconoce su responsabilidad en promover prácticas sostenibles y contribuir activamente a la protección de la biodiversidad costarricense. Acciones como esta jornada de voluntariado refuerzan la convicción de que cada actor puede aportar a la transformación ambiental, desde sus distintos ámbitos.
“De Vuelta a Casa” no es solo un proyecto de recuperación de los ecosistemas, sino también un llamado a la acción ciudadana. AERIS invita tanto a turistas como a residentes a reflexionar sobre el impacto de llevarse conchas marinas como recuerdo y a convertirse en embajadores del cuidado de nuestras costas. Cada concha que regresa al mar representa una oportunidad para restaurar el equilibrio ecológico y asegurar un futuro sostenible para las próximas generaciones.