
La educación virtual ha sido uno de los avances más significativos en el ámbito educativo de las últimas décadas. A lo largo de la pandemia, el mundo entero experimentó una aceleración sin precedentes de la digitalización de las aulas.
Sin embargo, pese a la expansión masiva de las plataformas educativas y las tecnologías disponibles, el acceso a la educación virtual sigue siendo un desafío en muchos contextos. La digitalización de la educación debe ir acompañada de un proceso que permita a los docentes, no solo usar las herramientas tecnológicas, sino, transformarse en guías competentes dentro de estos nuevos entornos.
La formación docente emerge como la herramienta principal que puede romper la barrera para el acceso a la educación virtual, pues es la capacidad de los profesores para adaptarse, aprender y enseñar en un entorno digital, lo que realmente puede garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad para todos. La competencia digital docente asegura que los estudiantes reciban una educación efectiva y enriquecedora, independientemente de su ubicación geográfica.
Los docentes debidamente capacitados saben cómo diseñar actividades y recursos que sean accesibles para estudiantes con diversas necesidades, como aquellas personas que cuentan con discapacidades, estudiantes de distintas culturas o aquellos que no tienen una conexión a internet constante.
En muchas regiones de Costa Rica y el mundo, la falta de acceso a internet sigue siendo una barrera para la educación virtual. Sin embargo, los profesores pueden utilizar diversas estrategias, como la creación de materiales offline, la utilización de plataformas que no demanden conexión constante o la distribución de contenidos en formatos accesibles, para garantizar que todos los estudiantes tengan igualdad de oportunidades.
La formación docente es la clave para romper la barrera que impide un acceso más equitativo y efectivo a la educación virtual. No es suficiente con proporcionar dispositivos o conectividad, la capacitación en el uso de herramientas tecnológicas y enfoques pedagógicos digitales es esencial para que los estudiantes se beneficien plenamente de la educación en línea.
Es fundamental que los docentes reciban formación continua y especializada, permitiéndoles adaptarse a los nuevos retos que presenta el entorno digital; sólo así podremos garantizar que todos los estudiantes, sin importar las circunstancias, tengan las mismas oportunidades de aprendizaje.
Artículo de opinión escrito por Juan Pablo Cardozo, director general regional de la Universidad del Istmo y la Universidad San Marcos.