
Ante la continua actividad del volcán Poás y la dispersión de ceniza en diversas comunidades, expertos hacen un llamado para que las personas tomen precauciones inmediatas y salvaguarden su salud.
El doctor José Antonio Ortega Martell, médico mexicano, especialista pediatra, alergólogo e inmunólogo clínico, se encuentra en el país para participar en el 23° Congreso Latinoamericano de Alergias, Asma e Inmunología, organizado por la Asociación Costarricense de Alergología representada por la Dra. Patricia Monge Ortega especialista en medicina interna y alergología, con el apoyo del Colegio de Médicos y Cirujanos, explica que el contacto con la ceniza volcánica representa un riesgo significativo para las vías respiratorias, la piel y el sistema gastrointestinal.
Señala que existe un impacto en las vías respiratorias, que afecta a cualquier persona, sin embargo, individuos con condiciones preexistentes como asma y enfermedades pulmonares obstructivas crónicas (EPOC), son particularmente vulnerables a experimentar complicaciones severas.
Otros riesgos importantes incluyen la irritación de la piel, que puede manifestarse con enrojecimiento y picazón en cualquier persona expuesta. Además, la contaminación del agua y los alimentos con ceniza puede desencadenar problemas gastrointestinales como diarrea y dolor de estómago si no se toman las precauciones adecuadas.
¿Qué hacer para protegerse?
El doctor Ortega Martell señala que, para la protección respiratoria, es esencial cubrirse las vías respiratorias, para ello, se recomienda enfáticamente el uso de mascarillas N-95, ya que son fácilmente accesibles y ofrecen la mejor protección contra la inhalación de partículas finas de ceniza. En caso de no tener mascarilla N-95, utilizar paños húmedos para cubrir nariz y boca.
Para el cuidado de la piel, es importante limpiar cuidadosamente la piel que haya estado en contacto con la ceniza, lavando con agua y jabón neutro de la mano de una hidratación constante con crema en la piel, y para la prevención de problemas gastrointestinales, es necesario lavar minuciosamente frutas y verduras antes de consumirlas y asegurarse de que el agua para consumo no esté contaminada con ceniza.
El Dr. Ortega Martell subraya la importancia de la prevención y el seguimiento de estas medidas para minimizar los efectos adversos en la salud derivados de la actividad volcánica.