
La identificación temprana y la intervención pueden ayudar a mantener la densidad ósea y reducir el riesgo de fracturas.
La osteoporosis es considerada una "enfermedad silenciosa" por su progresión sin síntomas hasta que ocurre una fractura, representa un problema de salud pública que va en aumento en Costa Rica. Según estudios recientes, el 64,5% de las mujeres posmenopáusicas presentan osteopenia y el 35,5% osteoporosis. Entre las mujeres mayores de 50 años, el 40% sufre de osteopenia y aproximadamente el 22% tiene osteoporosis.
Otro dato alarmante es el aumento proyectado de fracturas de cadera en el país. En 2004 se registraron 2.015 fracturas en personas mayores de 60 años, y se espera que este número incremente dramáticamente a 7.618 para 2050. Cada fractura de cadera genera un costo hospitalario estimado en USD $8.000 por paciente, de ahí la importancia de una intervención temprana.
La osteoporosis no suele presentar síntomas específicos en sus etapas iniciales, lo que dificulta su diagnóstico temprano. Sin embargo, existen señales que pueden indicar la presencia de esta enfermedad.
"La osteoporosis es una condición caracterizada por la disminución de la masa ósea y un aumento de la susceptibilidad a fracturas. Afecta a un 25% de las mujeres con más de 50 años y hasta un 15% de los hombres. Después de los 50 años, una en cada tres mujeres va a presentar una fractura osteoporótica, y uno en cada cinco hombres, de ahí la importancia de prestar atención a esta enfermedad", explicó el Dr. Daniel Freire, director médico de Sandoz para Latinoamérica.
Adicional, algunos otros síntomas de alerta de esta enfermedad están: fracturas que ocurren con traumas mínimos o sin razón aparente, que se presenten deformidades en las extremidades inferiores y dolor al realizar movimientos cotidianos.
Por su parte, entre las poblaciones con mayor riesgo de desarrollar la osteoporosis están:
- Mujeres mayores de 50 años: Una de cada cinco mujeres desarrolla este padecimiento.
- Mujeres posmenopáusicas: La disminución de estrógenos tras la menopausia acelera la pérdida de masa ósea.
- Personas de descendencia blanca y asiática: Estos grupos étnicos tienen mayor predisposición genética.
- Personas con antecedentes familiares: El riesgo aumenta significativamente con un historial familiar de fracturas u osteoporosis.
- Personas con bajo índice de masa corporal: Un peso corporal bajo se asocia con menor densidad ósea.
- Pacientes con otras/ciertas condiciones médicas.
"Durante mis años de experiencia, he observado que muchas personas desconocen que pertenecen a grupos de alto riesgo, especialmente las mujeres en la etapa posmenopáusica. Los datos de Costa Rica son particularmente alarmantes. El estudio realizado en el Hospital San Juan de Dios reveló una prevalencia del 39% para osteoporosis y del 47% para osteopenia en mujeres posmenopáusicas, lo cual nos dice que casi 9 de cada 10 mujeres en este grupo están en riesgo, y muchas no lo saben hasta que es demasiado tarde", comentó Freire.
Recomendaciones para una mejor calidad de vida
A continuación, cinco recomendaciones del experto para prevenir a tiempo la osteoporosis.
- Consumir adecuadamente calcio y vitamina D: Una alimentación rica en calcio y vitamina D es fundamental para la salud ósea. Incluya en su dieta productos lácteos, pescados grasos, vegetales de hoja verde y alimentos fortificados.
- Realizar ejercicio regularmente con peso: El ejercicio físico, especialmente aquellos que implican cargar el propio peso corporal, ayudan a fortalecer los huesos. Actividades como caminar, subir escaleras, bailar o levantar pesas son muy buenas para mantener la densidad ósea.
- Eliminar hábitos nocivos en la su rutina: Por ejemplo: el consumo excesivo de alcohol y el tabaquismo, que están directamente relacionados con la pérdida de densidad ósea. Eliminar estos hábitos ayudan a la prevención de la osteoporosis.
- Efectuarse pruebas de densidad ósea: Las pruebas de densitometría ósea son cruciales para la detección temprana, particularmente para mujeres mayores de 65 años o menores que han pasado por la menopausia y tienen factores de riesgo.
- Conocer los factores de riesgos personales: saber su historial y otras condiciones médicas.
"La prevención es nuestra mejor herramienta contra la osteoporosis. Con estas cinco recomendaciones básicas, podemos reducir significativamente el impacto negativo y silencioso que esta enfermedad tiene en la calidad de vida de los costarricenses y, disminuir, el costo económico que representa para el sistema de salud una fractura", concluyó el experto en medicina.
Por su lado, Sandoz trabaja para eliminar barreras y facilitar que más personas puedan acceder a medicamentos de alta calidad para el tratamiento de esta enfermedad, contribuyendo así a la lucha contra la osteoporosis en Costa Rica y toda Latinoamérica.