Defensoría constató que migrantes tienen temor de ser devueltos a su país de origen.
La Defensoría de los Habitantes dio a conocer su último reporte de observación relacionado con el grupo de 200 personas deportadas desde los Estados Unidos y en general todas las personas migrantes que se encuentran en el Centro de Atención Temporal de Migrantes en la frontera Sur (Catem).
Con respecto a las personas que fueron enviadas por el país norteamericano, el ente defensor destacó deficiencias de las autoridades migratorias para comunicarse con ellos. En ese sentido, la institución considera necesario que se facilite un espacio adecuado que permita aclarar todas las dudas que estas personas tienen en relación con el proceso migratorio.
Por ejemplo, detallaron que familias cuyo origen es Afganistán e Irán, y que llegaron el 20 de febrero, no han sido entrevistas dada la imposibilidad de contar con traductores. Por tal razón, carecen de información sobre su permanencia en el Catem y su destino final, manifestando gran temor de ser devueltos a su país de origen.
Sobre la deportación, la Defensoría destacó que el proceso migratorio fue regulado a través de una resolución que se circunscribe a su “estadía” en el Catem. Por ahora, se desconoce la alternativa que se otorgará a las personas migrantes que no puedan retornar.
Independientemente del proceso migratorio que haya aplicado el Gobierno de los Estados Unidos y de las coordinaciones o acuerdos a los que se haya comprometido el Estado costarricense, es necesario que Costa Rica verifique que, al regresar a sus países de origen, ninguna de estas personas será sometida a tratos crueles, inhumanos o degradantes”.
En el caso de de los migrantes de “flujo inverso”, la Defensoría durante la inspección, constató que fueron trasladados del sector de los cuartos o módulos a un espacio común en el que deben dormir todos juntos en catres individuales.
En estos espacios no exista ninguna separación por grupos familiares, mujeres embarazadas, personas con algún padecimiento de salud o con alguna necesidad de atención. Lo anterior es en desventaja clara con las personas migrantes del grupo de “repatriación-retorno asistido", detalló la Defensoría.
Con tránsito limitado
La Defensoría detalló que las autoridades migratorias informaron que las personas que se encuentran en el Catem-sur no se encuentran en condición de detención administrativa.
No obstante resaltaron que la medida de contención implementada, "es una limitación de tránsito en caso de que estas requirieran egresar del lugar a comprar algunas cosas, por ejemplo, y regresar a él".
Durante su visita, la Defensoría de los Habitantes no logró constatar que se realizara una negativa expresa a alguna persona que quisiera salir del lugar. Ante la consulta a las autoridades del Catem sobre la posibilidad de salir por parte de alguna de estas personas, se manifestó que no existiría limitación, pero sí estarían siempre custodiados.
La Defensoría aseguró estar preocupada de que, a partir de la medida de contención implementada, se puedan aplicar disposiciones propias de una detención administrativa por razones de control migratorio con alguna sanción que resulte aplicable a las personas migrantes que permanecen en el lugar, en caso de que intentaran salir.
Además la Defensoría de los Habitantes considera urgente insistir en la necesidad que el Consejo Nacional de la Persona Adulta Mayor (Conapam) y el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) garanticen una presencia permanente en el Catem y que la misma no se limite a la asistencia durante algunas horas o ciertos días a la semana.