Además, hace un llamado al Estado costarricense a reforzar la protección de los derechos de las mujeres con políticas públicas efectivas y accesibles.

El Instituto de Estudios de la Mujer (IEM) de la Universidad Nacional (UNA) manifestó el día de hoy por medio de un comunicado de prensa su profunda preocupación por la creciente violencia contra las mujeres en Costa Rica, reflejada en la alarmante escalada de femicidios, producto de "la inacción o ineficacia de las acciones estatales para cumplir con su deber de prevenir, atender y erradicar la violencia contra las mujeres".

Hasta ayer, se registraban cinco femicidios en lo que va del 2025. Estas cifras se suman a las 82 muertes violentas de mujeres registradas en 2024, según el Observatorio de Violencia de Género contra las Mujeres y Acceso a la Justicia del Poder Judicial, de las cuales 26 fueron clasificadas como femicidios, 16 como homicidios y 40 permanecen en análisis.

Desde el IEM-UNA agregaron:

Esta realidad pone de manifiesto profundas desigualdades de género históricas y estructurales y la desvalorización de la existencia de las mujeres. El incremento de los femicidios, con episodios de ensañamiento y violencia extrema, refleja un grave incumplimiento en la protección de los derechos humanos. Además, este contexto perpetúa la normalización de la violencia en los ámbitos social, cultural y mediático, al reforzar el impacto simbólico de estos crímenes. El problema no es un hecho aislado, sino que responde a un panorama más amplio, caracterizado por el debilitamiento de la institucionalidad pública, la reducción de programas educativos y preventivos, y la persistencia de discursos de odio que alimentan actitudes discriminatorias". 

En ese orden de ideas, el Instituto de la UNA realizó un llamado a las autoridades del Estado costarricense para que redoblen su compromiso en la protección de los derechos de las mujeres por medio de acciones concretas y efectivas:

  • Restauración y fortalecimiento de programas educativos: Es imperativo restituir y fortalecer de inmediato las iniciativas que promuevan la igualdad de género, la prevención de la violencia y el respeto por los derechos humanos desde las primeras etapas de formación así como la eliminación de los roles y estereotipos de género. La falta de estas herramientas educativas perpetúa las discriminaciones y sostiene la violencia estructural que afecta a las mujeres.
  • Políticas públicas efectivas y accesibles: El Estado tiene la responsabilidad ineludible de diseñar e implementar medidas integrales que garanticen servicios especializados, oportunos y accesibles para mujeres en situación de violencia. No cumplir con esta obligación constituye un incumplimiento grave de sus deberes como garante de los derechos humanos y la seguridad de su población.
  • Compromiso institucional firme: Es fundamental que las autoridades estatales asuman con determinación su rol de liderar, con un discurso claro y acciones contundentes, el rechazo a toda forma de violencia, incluida la violencia simbólica. El Estado debe demostrar con acciones concretas su compromiso con la construcción de una sociedad que valore y proteja la vida de las mujeres, que erradique la discriminación y garantice un entorno seguro para todas, haciendo la debida inversión de tiempo, esfuerzo y recursos de todo tipo.

Por su parte, la académica del Instituto, Sileny Mena, declaró:

El Estado tiene la responsabilidad ineludible de diseñar e implementar medidas integrales que garanticen servicios especializados, oportunos y accesibles para mujeres en situación de violencia. No cumplir con esta obligación constituye un cumplimiento grave de sus deberes como garante de los derechos humanos y la seguridad de su población. Además, se requiere un compromiso institucional firme. Es fundamental que las autoridades estatales asuman con determinación su rol de liderar con un discurso claro y acciones contundentes que rechacen toda forma de violencia, incluida la violencia simbólica. El Estado debe demostrar con acciones concretas su compromiso con la construcción de una sociedad que valore y proteja la vida de las mujeres. Erradicando la discriminación y garantizando un entorno seguro para todas, haciendo la debida inversión de tiempo, esfuerzo y recursos de todo tipo".

El IEM-UNA finalizó su comunicado de prensa indicando que "solo a través de un esfuerzo conjunto como sociedad podremos construir un país más seguro y libre para todas las personas. Es momento de actuar con decisión para proteger la vida de las mujeres y garantizar su derecho a vivir sin violencia".