
Plan propone promover la infraestructura resiliente, estimular la participación privada y fortalecer el contrato social.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) presentó hoy su nueva estrategia de país para Costa Rica, mediante la cual busca contribuir al crecimiento sostenible e inclusivo del país durante el periodo 2024-2027.
La estrategia contempla inversiones cercanas a los US$2.000 millones para su implementación, que incluyen el monto de la cartera actual y nuevos programas.
La nueva hoja de ruta se basa en tres pilares estratégicos. Primero, infraestructura resiliente para responder a los retos de competitividad del país. Segundo, un entorno habilitante para el sector privado, de modo que éste pueda contribuir con todo su potencial al desarrollo nacional. Y tercero, la protección del contrato social, priorizando áreas clave como educación y desarrollo de habilidades, seguridad ciudadana y protección social a personas en situación de dependencia y vulnerabilidad.
La estrategia, alineada con el marco institucional del BIDImpact+ y el programa regional América en el Centro, se ejecutará mediante una estrecha colaboración y sinergias entre el BID, que trabaja con el sector público; BID Invest, que trabaja con el sector privado; y BID Lab, el brazo de innovación y venture capital.
Esta hoja de ruta, aprobada por el Directorio Ejecutivo del BID en noviembre pasado, busca maximizar el impacto de la institución en el país.
“El BID es un aliado comprometido con el desarrollo de Costa Rica desde hace más de 60 años. Con esta estrategia construimos una propuesta de valor altamente selectiva que nos permitirá elevar nuestro impacto y efectividad en áreas prioritarias para el crecimiento integral del país. Nuestro enfoque propone transformaciones de largo plazo, fortaleciendo la infraestructura, estimulando la participación privada y apoyando el contrato social costarricense para beneficio de toda la población”, dijo Francisco Javier Urra, representante del BID en Costa Rica.
Nuevos proyectos en la mira
El BID aprobó en diciembre la primera operación bajo esta nueva estrategia, que consiste en el programa “Mejora de la calidad del sistema educativo en Costa Rica”, financiado mediante un préstamo de US$150 millones y una donación de US$7,5 millones. Asimismo, está preparando dos proyectos relacionados con seguridad ciudadana y el sistema de protección social.
La estrategia es producto de un amplio análisis de los desafíos y las oportunidades de Costa Rica, realizado por el equipo interdisciplinario del BID, de acuerdo con las prioridades de desarrollo del país. Asimismo, el Banco realizó un proceso de consulta con organizaciones de la sociedad civil para definir y validar los tres pilares de la estrategia.
La estrategia cuenta también con tres áreas transversales que estarán presentes en todos los proyectos: género y diversidad, infraestructura resiliente, y fortalecimiento institucional.
El Banco tiene actualmente un portafolio de proyectos en Costa Rica por US$1.453 millones, con nueve operaciones activas y 30 cooperaciones técnicas en sectores tales como infraestructura de transporte, energía, seguridad ciudadana, e integración fronteriza, entre otros.