Gobierno no pidió permiso previo al Congreso alegando que militares realizan labores humanitarias.
El plenario de la Asamblea Legislativa aprobó este miércoles, por mayoría, una autorización por vía de excepción para que las fuerzas militares salvadoreñas que ingresaron al país para realizar labores humanitarias, sin permiso previo del Congreso, puedan permanecer en territorio nacional.
Dicha moción fue aprobada con el voto afirmativo de 30 congresistas provenientes de las bancadas de Liberación Nacional, Frente Amplio, Liberal Progresista y diputadas independientes; y el voto en contra de 21 diputados del oficialismo, Nueva República y la Unidad Social Cristiana.
En la moción, la Asamblea agradeció "a las autoridades del hermano pueblo de El Salvador" por la donación y colaboración que han brindado al país en este momento producto de los estragos ocasionados por las malas condiciones climatológicas, y que ya llevaron al gobierno de Rodrigo Chaves Robles a declarar el estado de emergencia nacional en una veintena de cantones.
Además del agradecimiento, la moción agrega que con el fin de garantizar el respeto a lo establecido en la Constitución Política, referido al permiso que debe otorgar la Asamblea Legislativa para el ingreso de tropas, aeronaves o embarcaciones de guerra al país, el Congreso daba esa autorización, en esta ocasión, "por vía de excepción", es decir, con posterioridad a la entrada de las tropas al territorio nacional (y sin que el Gobierno la hubiese pedido formalmente).
Asimismo, la moción requiere al presidente Rodrigo Chaves que remita a la Asamblea un informe en el que detalle la cantidad de funcionarios de las fuerzas salvadoreñas que llegaron a Costa Rica, el rango de cada uno, y cuál será su tiempo de permanencia en el país.
Finalmente, el Congreso aprobó requerirle al gobierno que, a futuro, la solicitud de ingreso de aeronaves de guerra o de tropas se comunique con la debida antelación, para que la Asamblea pueda ejercer su competencia y otorgar los respectivos permisos.
Pilar Cisneros Gallo, jefa del oficialismo, criticó la moción al señalar que a criterio del Ejecutivo no tenían que pedir permiso para el ingreso de los militares pues estos arribaron desarmados y en aeronaves comerciales, no en aviones de guerra.
El gobierno no tiene que pedir permiso y no va a pedir permiso. Punto. ¿Por qué? En el 2015 hubo una resolución de este Congreso donde dice que solo las aeronaves de guerra con equipo sea ofensivo o defensivo tendrán que pasar por el filtro parlamentario antes de su ingreso a Costa Rica. Yo les pregunto si Avianca es un avión de guerra o no, si trajeron armas o no y evidentemente la respuesta es no y no".
Ayer martes Lydia Peralta Cordero, viceministra de Asuntos Bilaterales y Cooperación Internacional comunicó al Congreso el arribo de la ayuda humanitaria procedente de El Salvador, sin embargo, la comunicación en ningún momento hizo referencia a una solicitud de aprobación legislativa para el ingreso o permanencia de militares.
El artículo 121, inciso 5) de la Constitución Política establece que es competencia exclusiva de la Asamblea Legislativa autorizar el ingreso de tropas extranjeras al país, y la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia ha subrayado en sentencias anteriores la responsabilidad del Congreso en proteger el derecho a la paz y la soberanía nacional al decidir sobre la presencia de fuerzas militares extranjeras.
En una de esas sentencias la Sala IV señaló que no era competencia de las instituciones del Poder Ejecutivo el definir cuándo se estaba ante tropas, aeronaves o embarcaciones militares o de guerra, sino que esa era una labor exclusiva del Congreso.
En el 2015 la Asamblea emitió una resolución de su presidencia, apoyada por todas las fracciones de aquel entonces, para que en materia de aeronaves solo se requiriera el permiso si estas vienen artilladas o con dispositivos de intervención de telecomunicaciones o radares. En materia de embarcaciones y de tropas no se ha emitido reglamentación al respecto.
Debate
Eliecer Feinzaig Mintz, del Partido Liberal Progresista (PLP), agradeció la ayuda humanitaria enviada por El Salvador, destacando que fue posible gracias a los impuestos de los salvadoreños. Sin embargo, señaló un vacío en la Constitución, específicamente en el artículo 121 inciso 5, sobre el ingreso de naves y personal militar, que requiere regulación para evitar ambigüedades.
El líder del PLP planteó que la Asamblea Legislativa defina cuándo es necesario que el gobierno pida permiso para el ingreso de personal militar, poniendo como ejemplos de situaciones que no lo deberían ameritar la llegada de un comandante del Comando Sur de Estados Unidos para reunirse con funcionarios del Ministerio de Seguridad Pública, o misiones humanitarias no armadas.
Finalmente, Feinzaig hizo un llamado al gobierno y la Asamblea Legislativa para regular este tema y garantizar el cumplimiento de la Constitución, recordando que los procedimientos no son meros adornos, sino requisitos legales que deben respetarse:
Al gobierno le hacemos el llamado de atención, es un gobierno que está acostumbrado a pasar por encima de todas las regulaciones, entendemos que en una situación de emergencia y ante el ofrecimiento espontáneo del presidente de El Salvador decidieron aceptar esto sin haber pensado en las consecuencias legales, pero insistimos en que hay una Constitución Política que se tiene que respetar, los procedimientos se tienen que cumplir, no están de adorno y por lo tanto hacemos este llamado a la Asamblea a regular y al gobierno a cumplir con lo que se le exige".
Gloria Navas Montero, diputada independiente, expresó su agradecimiento hacia el pueblo salvadoreño por la ayuda humanitaria enviada, destacando la generosidad de una nación también necesitada. Afirmó que la gratitud debe ser sincera, pero recordó que la Constitución costarricense establece que la Asamblea Legislativa debe decidir sobre el ingreso de tropas o naves extranjeras.
Navas subrayó que la defensa del marco constitucional es esencial y que este no es un simple capricho, sino el resultado de una tradición democrática de más de 75 años que garantiza la seguridad jurídica, por lo que pidió al presidente de la República aclarar los detalles sobre la cantidad y naturaleza de las fuerzas salvadoreñas que ingresaron, insistiendo en que Costa Rica es un país pacífico y debe velar por el respeto a la legalidad.
Óscar Izquierdo Sandí, jefe del Partido Liberación Nacional, expresó su agradecimiento al pueblo salvadoreño por la solidaridad mostrada ante los daños causados por el mal tiempo en Costa Rica y resaltó la generosidad de un país con un 30% de pobreza, que, a pesar de sus dificultades, brindó ayuda a Costa Rica, cuya tasa de pobreza es del 18%.
Asimismo, Izquierdo reconoció el esfuerzo de las fuerzas de emergencia costarricenses, como Bomberos y Cruz Roja, que están asistiendo a los afectados. Aunque mencionó que el debate sobre la presencia de fuerzas militares extranjeras debe darse en el futuro, insistió en que el foco actual es la recuperación y la ayuda a los compatriotas afectados.
Ada Acuña Castro, del oficialista Progreso Social Democrático reiteró el voto en contra de los diputados de gobierno calificando la moción de "ridícula" por pedir detalles sobre la cantidad y roles de los militares que llegaron al país. Acuña subrayó que Costa Rica está en medio de una emergencia y que el enfoque debe ser la gestión de la ayuda humanitaria, agradeciendo al gobierno de El Salvador por su apoyo.
Por su parte, María Marta Carballo, de la fracción del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), expresó su solidaridad con los afectados y agradeció al pueblo salvadoreño, al tiempo que aclaró que su fracción nunca cuestionó la ayuda recibida y que se ha malinterpretado su postura.
Carballo explicó que, tras revisar jurisprudencia, concluyeron que naves y militares no armados no necesitan permiso legislativo por lo que criticó a los partidos que usan este tema para crear un "show político".
Fabricio Alvarado Muñoz, de Nueva República, cuestionó las prioridades de la Asamblea Legislativa al debatir la autorización para la ayuda humanitaria salvadoreña, preguntando cómo reaccionarían los damnificados si ocuparan las curules. Alvarado destacó que las ayudas ya están beneficiando a las comunidades afectadas, como Guanacaste y la zona sur, y señaló que si la Asamblea hubiera demorado en el permiso, la asistencia habría llegado tarde.
El diputado criticó a quienes evitan reconocer al presidente salvadoreño Nayib Bukele por su decisión de enviar la ayuda y adelantó el voto en contra de su fracción, afirmando que la moción debería limitarse a agradecer al presidente y al pueblo salvadoreño.
Finalmente Antonio Ortega Gutiérrez, del Frente Amplio, señaló que el gobierno tardó en declarar la emergencia, cuestionando que lo hiciera solo después de despedir a las visitas internacionales y posterior a que 22 diputaciones firmaron una solicitud de declarar emergencia.
Ortega también reconoció a los funcionarios y voluntarios que desde el inicio de la crisis trabajaron en las zonas afectadas, incluso mientras otros participaban en "cenas de gala".
El jefe de los frenteamplistas advirtió que su partido no se prestará a polémicas políticas para ganar popularidad y enfatizó que, por ahora, la prioridad debe ser la ayuda a los damnificados, dejando los debates constitucionales para otro momento.