En un entorno global marcado por la volatilidad e incertidumbre, la elección estratégica de sectores para la exportación y la inversión se convierte en una tarea crucial para garantizar el crecimiento sostenible de un país. Costa Rica, a través de entidades como la Promotora del Comercio Exterior (Procomer), ha identificado la importancia de adoptar un enfoque basado en datos cuantitativos y cualitativos para tomar decisiones informadas y acertadas sobre los sectores en los que debe apostar.
El análisis de la complejidad económica se ha vuelto fundamental en este proceso. Comprender la estructura y las dinámicas de la economía permite identificar sectores con ventajas competitivas y potencial de crecimiento a largo plazo, incluso en tiempos inciertos. Este enfoque puede detectar oportunidades en áreas estratégicas, como por ejemplo los componentes automotrices, que no solo ofrecen oportunidades inmediatas, sino que también pueden ser motores de innovación y generación de empleos de calidad. Para ejemplificar esta observación, el Observatorio de la Complejidad Económica nos muestra que el mercado mundial de esta categoría distribuye más de $398 billones de US dólares y logra activar 28 actividades adicionales de producción, en las que Costa Rica puede llegar a tener ventajas competitivas. Pero también resulta clave para consolidar los sectores que venimos trabajando y ampliarles las oportunidades.
Dicho esto, se torna vital realizar prospección basada en datos para gestionar la incertidumbre en la economía global. Al analizar patrones y tendencias en mercados emergentes, tanto empresas como gobiernos pueden anticipar cambios y adaptarse de manera proactiva. En este sentido, Procomer ha destacado la necesidad de combinar herramientas para identificar las tendencias del mercado que impulsarán la creación de nuevas estrategias industriales en Costa Rica, estos estudios -elaborados por la Dirección de Inteligencia Comercial- están disponibles de forma gratuita en la página web de la institución.
Estas estrategias industriales no se limitan a acciones aisladas, sino que buscan amalgamar esfuerzos entre empresas, cadenas de valor, consorcios, clústeres y cámaras empresariales. De esta manera, se genera un enfoque integrado que impulsa no solo a sectores específicos, sino a toda la industria, promoviendo un desarrollo más equilibrado y estructurado. Un ejemplo este proceso de integración es el trabajo que se hace desde Procomer, primero con la visión estratégica, seguido con el análisis de información de mercado que se convierte en acciones para determinar potenciales encadenamientos, exportaciones y prospección de inversión.
Elegir los sectores adecuados en tiempos de incertidumbre no solo permite mitigar riesgos, sino que también abre la puerta a nuevas oportunidades económicas. Al apostar por sectores con ventajas competitivas, se fomenta la innovación y se asegura un crecimiento sostenible que beneficie a todos los actores de la economía. Esta visión integrada, que articula esfuerzos entre el sector privado, académico y gubernamental, es esencial para enfrentar los retos de un entorno comercial en constante cambio.
Este análisis de la complejidad económica es una herramienta clave para diseñar políticas públicas que promuevan un desarrollo económico justo y resiliente. En un mundo cada vez más conectado y competitivo, la capacidad de gestionar la incertidumbre es un diferenciador clave para países como Costa Rica y es a través de una selección estratégica de sectores y el fortalecimiento del ecosistema empresarial, que el país puede posicionarse como un actor relevante en la economía global, impulsando tanto la innovación como la creación de empleo de calidad.
Por esta razón, la apuesta por nuevos sectores a través de análisis de complejidad económica no es solo una respuesta a la incertidumbre, sino una estrategia para construir un futuro más sólido y equitativo que lleve desarrollo y bienestar a todas las regiones del país. Con un enfoque claro y analítico basado en datos, Costa Rica puede reducir riesgos, y la vez maximizar sus oportunidades de crecimiento que deriven en empleo y mejores condiciones para su población.
Este arículo fue escrio por Guillermo Zúñiga-Arias, director de Inteligencia Comercial de Procomer