Un nuevo espacio cultural público para artistas de la fotografía.
A raíz de la colaboración del Ministerio de Cultura y Juventud, el Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación y el Centro Cultural de España, se abre un nuevo espacio público cultural al aire libre para aquellas personas que transitan por el Estadio Nacional.
En el espacio se podrán exhibir a lo largo del año "nuevas miradas que ayuden a construir ciudadanía y el desarrollo humano a través de la lente de una cámara", aseguraron desde la Embajada de España.
La primera exposición que se inaugura este 29 de octubre a las 9:00 am está dedicada a la Cooperación Española que cumple 40 años de estar presente en Costa Rica, contando con la presencia del director de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), Antón Leis, la embajadora de España, Eva Martínez, y el ministro de Cultura y Juventud, Jorge Rodríguez, entre otras autoridades.
Esta exposición inaugural se presenta también de manera física en la sala del Centro Cultural de España, de manera que las obras de las fotografías se pueden visitar en persona a partir también del 29 de octubre a las 7:00 p.m. La muestra se inaugurará con una fiesta de celebración con comida, bebidas y música a cargo de Cantoamérica y Stephie Davis: “Queen of the Sea”.
La muestra estará abierta en el CCE hasta el 23 de febrero 2025 y en la galería fotográfica al aire libre hasta el 1 de diciembre 2024.
Detalles de la exposición
A través de la exposición fotográfica con la cual se inaugura la galería, 40 Años de la Cooperación Española en Costa Rica, se reflejan algunos proyectos emblemáticos de la Cooperación Española en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), así como su acción humanitaria en eventos naturales trágicos, como el terremoto de Cinchona y en momentos álgidos del paso de migrantes en tránsito.
Según la Embajada de España, a lo largo de estos cuarenta años se han realizado más de 1.200 proyectos repartidos por todo el país, con un aporte de casi 500 millones de euros que han contribuido al desarrollo socioeconómico del país, en los que han participado diferentes instituciones y organizaciones españolas, como la AECID.
A la par de estos proyectos, artistas costarricenses han plasmado en diferentes técnicas (pintura, escultura, audiovisual, instalación, entre otros) su visión sobre cada uno de los ODS, configurando los diferentes paneles. Esta muestra, curada por Ricardo Ramón Jarne, director del Centro Cultural de España, e Iris Lam Chen, curadora y gestora cultural de la misma institución, presenta las obras de Aimée Joaristi, Ariela Kader, Carlos Andrés Fernández Rodríguez, Diana Gardeneira, Felo García, Francesco Bracci, Graciela Fournier, H. Jiménez Sandoval, Ivannia Lasso, Joan Villaperros, Jose Carlos Muñoz, Karla Herencia, Luciano Goizueta, Mimian Hsu, Priscilla Monge, Rurales, Yamil de la Paz García y generaciones egresadas del CETAV - La Libertad CR.
Desde la Embajada añadieron:
Esta exposición destaca, novedosamente, cómo el arte y la cultura, elementos esenciales para el entendimiento y el desarrollo humano, se han integrado a los procesos de la cooperación técnica, creando puentes entre el desarrollo, la cultura y la sostenibilidad. Este enfoque refleja la importancia de las alianzas entre España y Costa Rica en la promoción de una cooperación integral que reconozca el valor transformador de la cultura en el cumplimiento de los ODS y en la construcción de sociedades más inclusivas y equitativas".
Asimismo, la exposición realiza un recorrido artístico con las obras de 18 artistas y colectivos costarricenses que aluden a cada uno de los ODS y la acción humanitaria.
Entre las obras destacadas se encuentra Guten Morgen de Ariela Kader, una obra que profundiza en la relación entre el ser humano y los desechos que genera, proponiendo que "somos más lo que desechamos que lo que consumimos”. La gacetilla de prensa explica que “La artista invita a reflexionar sobre la identidad y el consumo, mostrando cómo los residuos materiales pueden ser una extensión de nuestro ser en los espacios que habitamos. La obra desafía al espectador a cuestionar sus hábitos de consumo y a considerar cómo los productos que compramos y desechamos reflejan nuestras prioridades y valores”.
En relación con el ODS 12 de Consumo responsable, Guten Morgen se convierte en una “crítica visual que nos recuerda la importancia de rechazar, reimaginar, reducir, reutilizar y reciclar, alentando un enfoque más consciente y sostenible en la gestión de los residuos. La obra destaca la necesidad urgente de reconsiderar nuestras prácticas de consumo y la huella que dejamos en el mundo, no solo en el ámbito público, sino también en los rincones más privados de nuestra vida diaria”.
Por su parte, también destaca Pupitres de Priscilla Monge, que se presenta como una meditación crítica sobre la relación entre la memoria, la educación y la violencia, abordando temas fundamentales del ODS 4: garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad. La serie nace a partir de un sueño inquietante y un trágico evento de violencia escolar en Estados Unidos, los cuales impulsan a Monge a cuestionar el papel de la educación en la formación de sociedades más pacíficas y justas.
En Pupitres, "Monge transforma el pupitre escolar, símbolo tradicional de aprendizaje, en un objeto de reflexión sobre las cicatrices que la violencia puede dejar en la memoria colectiva. Al reemplazar las superficies de madera por mármol y grabar en ellas textos relacionados con la educación y la memoria, la artista subraya la importancia de recordar y aprender del pasado para evitar la repetición de la violencia. Este acto de grabar sobre mármol, un material duradero y solemne, simboliza la necesidad de una educación que no solo transmita conocimientos, sino que también fomente la reflexión crítica y el compromiso con la paz y la equidad". En la muestra se exponen los dibujos que Monge realizó para crear los pupitres de mármol.
Tugurios (1970) de Rafael Ángel "Felo" García es otra de las obras destacada. La pieza aborda de manera crítica las condiciones de pobreza y exclusión social en Costa Rica, en línea con el ODS 1: poner fin a la pobreza en todas sus formas en todo el mundo.
García "se aleja del expresionismo abstracto que había caracterizado su obra previa, adoptando un enfoque neofigurativo para retratar la cruda realidad de los barrios marginales del país. A través de estas obras, visibiliza la precariedad extrema en la que viven las clases populares, exponiendo la desigualdad socioeconómica que se manifiesta en la falta de acceso a vivienda digna, servicios básicos y oportunidades económicas. Las representaciones de los tugurios, con su lenguaje visual directo y simbólico, no solo documentan la degradación del entorno urbano, sino que también denuncian la falta de justicia social que perpetúa la pobreza".