Tras el ataque de Hamas el 7 de octubre 2023, los detractores del Estado de Israel han redoblado sus esfuerzos en la guerra mediática y de la desinformación, donde buscan deslegitimar, demonizar y juzgar con una doble moral al estado judío para volcar la opinión pública en su contra. En este contexto, ha aparecido una nueva figura que a la causa anti sionista le ha caído como anillo al dedo. En inglés se le llama el judío "As a jew", o lo que se traduciría al español como el judío "como judío".

Es aquella persona, típicamente con tendencias políticas progresistas y de izquierda, que explota su identidad o su ascendencia judía, para validar los ataques difamatorios contra Israel. El nombre viene precisamente de la forma en la que comienza sus oraciones para decir cosas al estilo de "como judío, me opongo al genocidio en Gaza" o "como judío, pienso que el Estado de Israel es ilegitimo", como si cualquiera de estas afirmaciones por más falaces, fácticamente desatinadas, y a menudo incluso antisemitas, se tornaran válidas y ciertas por el mero hecho de que una persona que se identifica como judía es quien las emite. Lo hemos visto en Estados Unidos, en Europa e incluso aquí, en Costa Rica.

El judío "As a jew" no es más que una herramienta de los enemigos del pueblo judía para avanzar esta agenda de deslegitimación, demonización y doble moral contra Israel.  Habla de no permitir que Israel utilice a los judíos para la causa sionista, pero está perfectamente dispuesto a él mismo ser utilizado por la causa anti sionista para la destrucción del Estado Judío.

Los comportamientos del judío "As a jew" son prácticamente patológicos, forman un patrón que se repite constantemente y permiten identificarlos con facilidad. Aquí dejo diez ejemplos de cómo identificar a uno:

  1. ⁠El judaísmo no juega ningún papel en su vida más que validar su odio por Israel. No lo menciona si no únicamente cuando habla de Israel.
  2. Afirma que la conclusión de sus aprendizajes, que a menudo son escasos, sobre la Torá y la historia del pueblo judío, es que debe prevenir que otras personas sufran, y que para eso está dispuesto a condenar incluso a Israel, pero lo que hace en realidad es condenar solo a Israel. Se auto proclama "antisionista", o sea, que de los 195 países reconocidos por la ONU, está de acuerdo con que 194 existan, pero Israel no.
  3. Compara la situación de los palestinos con las víctimas del holocausto. Justificará el ataque del 7 de octubre alegando que desde hace años Gaza ha sido un campo de concentración. ¿Sus abuelos no le habrán contado que en Auschwitz nunca hubo un supermercado, centro comercial u hoteles?
  4. Utiliza la palabra genocidio y se refiere a La Convención para la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio, para invocar los traumas históricos del pueblo judío. Claro, la usa cuando describe los operativos militares de Israel, pero nunca para hablar del ataque del 7 de octubre, que es la expresión material de las intenciones que Hamas mismo dispone en el artículo 7 de su propia carta fundacional donde habla sobre su mandato divino de exterminar a todos los judíos.
  5. ⁠Dice que apoyar al pueblo palestino no implica apoyar a Hamas, pero nunca condena a Hamas. De hecho, solo menciona a Hamas cuando escribe un artículo condenando a Israel, pero nunca escribiría un artículo sobre lo atroz que es Hamas.
  6. Equipara a Israel, una democracia, con Hamas, una organización terrorista yihadista. Dice cosas como "la liberación de todos los rehenes israelíes y palestinos" como si Kfir Bibas, que fue secuestrado antes de cumplir un año, fuera lo mismo que Abdullah Barghouti, un terrorista experto en explosivos que está en prisión tras declararse culpable del asesinato de 66 personas.
  7. Siempre habla de "76 años", como si el conflicto hubiese comenzado en 1948 con la creación del Estado de Israel. Pero nunca mencionaría las masacres perpetradas por árabes contra judíos antes de que existiera el Estado de Israel, como la Masacre de Hebrón o la Masacre de Safed de 1929.
  8. ⁠Dice que rechaza todos los discursos de odio, pero es absolutamente permisivo con el antisemitismo disfrazado de anti sionismo. Cuando sus compañeros de lucha regurgitan retórica antisemita empleando la artimaña de reemplazar la palabra "judío" con "sionista" para decir que estos controlan la prensa, la economía o la política, cosas que parecieran salidas de Mein Kampf o Los Protocolos de los Sabios de Sion, no lo denuncia. No lo menciona en sus entrevistas, artículos, paneles.
  9. ⁠Es feminista. Pero no habla sobre la violencia sexual reportada el 7 de octubre, o incluso la niega, porque siempre le cree a las mujeres, menos a las israelíes.
  10. Habla desde una posición de privilegio. Desde la comodidad de un país democrático que le concede todos sus derechos, en el año 2024, dice "no todos los judíos estamos de acuerdo con Israel". Ignora que si el año o el lugar fueran otro, un estado soberano que pueda dar refugio y proteger a cualquier judío que lo necesite, no sería para él un tema de preferencia, sino una necesidad. Si en lugar de estar marchando en un campus universitario en una protesta pro palestina, estuviera marchando a la cámara de gas, a la horca, a la hoguera ¿sería igual "anti sionista"?

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