Señala su preocupación en torno a la incertidumbre que rodea el futuro del fideicomiso en cuestión.
La Cámara Costarricense de la Construcción (CCC) posiciona su inquietud por el futuro del Fideicomiso Inmobiliario CCSS-BCR 2017, el cual ha sido fundamental para la gestión y construcción de infraestructura de salud en Costa Rica. Este fideicomiso, cuya inversión total asciende a US$700 millones, abarca 30 áreas de salud, 22 sucursales y direcciones regionales, y un centro de logística, beneficiando a numerosas comunidades, en especial aquellas en zonas remotas fuera de la Gran Área Metropolitana (GAM), que llevan años esperando servicios de salud dignos y esenciales.
El fideicomiso, refrendado en 2017, tiene una vigencia de siete años, con la posibilidad de ser extendido por un período adicional de siete años. Sin embargo, para que esta extensión sea efectiva, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) debe manifestar su intención de prórroga, la cual debe ser presentada 90 días antes del vencimiento del contrato, programado para el 24 de octubre de 2024. A la fecha, la CCSS no ha realizado dicha solicitud formal, lo que pone en peligro la continuidad de proyectos cruciales para el sistema de salud del país.
En marzo de 2023, la Junta Directiva de la CCSS anunció la suspensión de la cartera de proyectos del fideicomiso para revisar las finanzas internas de la institución. Aunque en mayo de 2023 se reanudaron 30 de los proyectos, el riesgo de parálisis sigue latente. La CCC destaca que, si no se renueva el fideicomiso, las obras se verán detenidas por completo, afectando a las comunidades beneficiadas y exponiendo a la CCSS a posibles indemnizaciones millonarias por parte de las 14 empresas de construcción y 40 empresas consultoras en ingeniería y arquitectura ya contratadas.
Randall Murillo, director ejecutivo de la CCC, subrayó:
La no renovación del fideicomiso no solo afecta la salud pública, sino también la economía del país, al detener proyectos que generan miles de empleos directos e indirectos en el sector construcción. Las comunidades más vulnerables, fuera del GAM, serían las más perjudicadas, lo que agrava aún más la situación”.
La CCC hace un llamado urgente a las autoridades de la CCSS para que se tomen las medidas necesarias para garantizar la continuidad del fideicomiso. El programa ya ha completado o está por completar la preingeniería de la mayoría de los proyectos, una etapa que toma entre 2 y 3 años. La interrupción de este proceso no solo afectaría el desarrollo de la infraestructura sanitaria, sino que también tendría serias repercusiones en la seguridad jurídica de las empresas contratadas.
La CCC recomienda que se permita al fideicomiso continuar con la construcción de las 30 áreas de salud y que se valore la inclusión de los otros proyectos programados, tales como las sucursales, direcciones regionales y el centro de logística. Los fideicomisos de obra pública son herramientas eficaces que permiten gestionar proyectos de manera ágil y eficiente, asegurando el buen uso de los recursos públicos y promoviendo el desarrollo de infraestructura crítica para el país.
La CCC reafirma su compromiso de continuar trabajando por el bienestar de las comunidades costarricenses y la promoción de prácticas eficientes en la ejecución de proyectos de infraestructura pública.