Entrada de divisas al país generaría presión a la baja, mientras que el diferencial de tasas de interés entre colones y dólares limitaría la demanda de inversiones en colones.

Según el académico y encargado de la Cátedra de Estadística de la Universidad Estatal a Distancia (UNED), Rolando Saborío Jiménez, el tipo de cambio se mantendría en un rango de entre ₡510 y ₡530 por dólar para el cierre de 2024.

El economista explicó que en la actualidad el tipo de cambio es una de las variables macroeconómicas más difíciles de proyectar, pues diversos factores locales e internacionales interactúan y afectan su comportamiento particularmente con la llegada de fin de año. 

Saborío detalló que, a corto plazo, la entrada de divisas al país genera presión a la baja sobre el tipo de cambio entre otros aspectos como el pago de aguinaldos, llegada de turistas al país, entre otros. No obstante, el diferencial de tasas de interés entre colones y dólares -con bajos incentivos para invertir en colones- ejerce una presión al alza. 

Asimismo, destacó que el Banco Central de Costa Rica (BCCR) ha intervenido en diversas ocasiones con el objetivo de evitar fluctuaciones abruptas, de controlar la inflación y brindar estabilidad en el país ante posibles factores adversos. 

“Observamos que el tipo de cambio se ha mantenido relativamente estable en los últimos meses, y es probable que continúe así en lo que resta del año y, posiblemente hasta los primeros meses de 2025”, indicó el académico. 

A su vez, agregó que, a medida que nos acercamos al cierre del año, es probable que esta estabilidad se mantenga, influenciada por la política monetaria del Banco Central y otros factores económicos, como la inversión extranjera directa.

Además, Saborío advirtió que cualquier intervención de la institución pública podría ser clave para evitar fluctuaciones indeseadas que afecten a la inflación y a la economía en general.

Con este panorama, el académico de la UNED compartió algunas recomendaciones para el manejo adecuado del dólar en el contexto actual:

  • Diversificar inversiones: Mantener una combinación de activos en colones y dólares permite reducir el impacto de fluctuaciones cambiarias en los ahorros. Esto asegura que el portafolio de inversión se adapte mejor a movimientos en el mercado cambiario.
  • Evitar deudas en dólares: Para quienes reciben ingresos en colones, es recomendable evitar endeudarse en dólares, ya que una subida inesperada en el tipo de cambio podría elevar el monto a pagar.
  • Aprovechar periodos de estabilidad: Ante la relativa estabilidad del tipo de cambio proyectada para los dos últimos meses, se pueden planificar compras o inversiones en dólares de manera ordenada, evitando riesgos innecesarios y optimizando los recursos en función de las necesidades a largo plazo.
  • Mantener fondo de emergencia: Dado que el mercado cambiario es sensible a factores externos, contar con una reserva en colones y en dólares puede ayudar a cubrir imprevistos sin depender exclusivamente de un solo tipo de cambio.
  • Monitorear política monetaria: Las intervenciones del BCCR pueden influir significativamente en el comportamiento del tipo de cambio. Estar al tanto de las decisiones y acciones del BCCR permite ajustar las estrategias financieras con tiempo, en respuesta a posibles cambios en el mercado.

“Finalmente, reiteramos la importancia de mantenerse informado y proactivo frente a un entorno económico cambiante que faciliten la planificación y la toma de decisiones en un entorno de volatilidad controlada”, concluyó Saborío.