La artista costarricense, reconocida por sus poemas, comparte una nueva obra publicada por Ediciones Perro Azul.
El próximo lunes 23 de setiembre a las 7:00 pm en el Centro Cultural de España, Carolina Quintero y Alfredo Trejos presentarán “Ahora”, una obra literaria de Olga Goldenberg Guevara.
Goldenberg nacida en San José y criada en sus primeros años de vida en Nicoya, Guancaste, es docente e investigadora jubilada de la Universidad Nacional (UNA), asimismo, trabajó en investigaciones con enfoque de género en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO CR), así como en la Defensoría de los Habitantes, el Instituto Nacional de las Mujeres (Inamu) y la Asamblea Legislativa.
Su amor por la poesía se manifestó desde su adolescencia, pero es hasta su jubilación que obtiene el primer lugar en el Concurso de Poesía 2013 de la Editorial UCR con el libro “Itinerarios al Margen”, y con ello, se publicó su primer poemario. En el 2016, la Editorial Germinal publicó su obra “Sombra que soy” y en 2022, por medio de Encino Ediciones lanzó “Espirales del Silencio”.
Sobre “Ahora” comenta Alfredo Trejos:
Olga Goldenberg Guevara es, ante todo, una mujer que resiste y su resistencia emerge desde profundas regiones de la lucidez: la sabiduría, la maternidad, el activismo, la creación y la contemplación. Y resiste pues la vida misma así se lo ha impuesto, a lo que ella no ha dejado de ofrecer copiosas respuestas […] En estos poemas está la voz en forma de caracol cuyo sonido es evidencia misma de todo lo que cae sobre el papel; está el informe actualizado sobre un mundo que pende de cabeza; y está el universo de la mujer que decide despertar a medianoche”.
A la interpretación anterior, Carolina Quintero añade:
La autora encuentra la fuerza y precisión, para hablar de nosotras, desde la voz femenina que defiende y alberga la vida. Nos vuelve a mostrar el espanto de la violencia machista, de los cuerpos de mujeres en barrancos, en ríos y en refrigeración. Pero a la vez, presenciamos un mundo nuevo, que parimos las mujeres, quienes desde los inicios alimentamos el fuego de la vida y las sendas del amor. Al terminar de leer «Ahora», quedamos así, frente al abismo, sin nada que decir, pero sostenidos de las manos, evitando la caída.