Magistrados afirman que presencia de la imagen no impone una fe o creencia.

La Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia ordenó al director general del Hospital México que en un plazo de tres días entregue el permiso necesario para que se coloque de nuevo la imagen del Santo Cristo en la entrada a la sala de operaciones de ese centro médico.

Según informó la oficina de prensa del alto tribunal, la decisión de los magistrados constitucionales fue unánime y se emitió a raíz de un recurso de amparo planteado por una enfermera del nosocomio.

La enfermera relató a la Sala que la imagen en cuestión estuvo colocada en la pared de la entrada a las salas de operaciones desde al menos el año 2008 y que fue removida por una remodelación que se hizo en esa zona, para posteriormente trasladarla a la entrada de las salas de operaciones en el nuevo edificio, contiguo a las oficinas administrativas, hasta que el director general del centro médico ordenó que fuera retirada.

Aunque la denunciante solicitó permiso formal para volver a colocar la imagen en la pared donde estaba, el director del hospital denegó el permiso señalando que debía "velar por el derecho al libre culto y diversidad religiosa de los diferentes grupos ocupacionales del Hospital México".

Los magistrados afirmaron que tales acciones constituyeron una violación al artículo 75 de la Constitución Política, referido a la libertad de culto, pues la razón dada por el director del centro médico para rechazar la solicitud carecía de fundamentación objetiva y razonable, ya que la presencia de la imagen no imponía una fe o creencia, sino que era un ejercicio de libertad de culto.

La Sala condenó a la Caja Costarricense de Seguro Social a pagar las costas, daños y perjuicios causados, los que podrán ser reclamados en el proceso de ejecución de sentencia en la vía contencioso-administrativa.

El tribunal que deliberó este caso estuvo integrado por Fernando Castillo Víquez (presidente), Paul Rueda Leal, Luis Fernando Salazar Alvarado (instructor), Jorge Araya García, Anamari Garro Vargas e Ingrid Hess Herrera y la magistrada suplente Alexandra Alvarado Paniagua.