Millones de costarricenses tuvieron la posibilidad de regresar de su peregrinación hacia la Basílica de Los Ángeles en autobús o en tren, con la ventaja de que no tuvieron que preocuparse por cargar efectivo en su viaje de vuelta a casa.
Esto gracias a que los autobuses de Cartago hacia San José, e incluso el servicio de trenes, cuentan con la tecnología de pago sin contacto, algo que hace algunos años no era posible para los usuarios.
Pagaron con sus tarjetas de crédito o débito, dispositivos inteligentes como relojes o celulares, disfrutando las ventajas de una economía digital que refleja más el presente que el futuro. Y las transacciones se dieron con un solo toque en la terminal, sin riesgo de cobros duplicados, especulación en el costo del pasaje o de cargar efectivo. Todo englobado en una experiencia más fácil, rápida e higiénica.
Los pagos digitales desde varios dispositivos cambiarán no solo la experiencia de viajar, sino también la de asistir a espectáculos públicos, eventos deportivos, parques nacionales, ir a comer o irse de compras.
Actualmente, el 54% de las transacciones en efectivo de Costa Rica corresponde al transporte público, pero si las transformamos, el 80% de las transacciones del país sería digital.
Digitalizar el transporte público, es un avance que no deja a nadie atrás y que es sinónimo de una inclusión financiera que brindará la oportunidad a aquellos que antes estaban excluidos del sistema financiero formal de conectarse a la economía digital y empezar a disfrutar de sus ventajas.
Kristine Matheson, Country Manager para Costa Rica, Panamá y Nicaragua en Mastercard.
A partir del 2021, Mastercard, en colaboración con las autoridades de Costa Rica y sus socios financieros, respaldó la implementación de la tecnología de pago sin contacto en el servicio de trenes de Incofer y, en el 2022, en 200 autobuses de siete rutas de transporte público.
Los números hablan por sí solos. Desde entonces, 43% de los pasajeros del tren y cerca de 30% de los usuarios de esas rutas de autobuses han aprovechado la practicidad, sencillez y eficiencia de este método de pago.
Para este año, el pago sin contacto ya está disponible en 518 unidades de autobús de diversas zonas del Gran Área Metropolitana (GAM), así como en todas las rutas de Incofer.
Los beneficios además se extienden a la población adulta mayor, que pueden usar la tecnología de pago sin contacto a través de la tarjeta Ciudadano de Oro, presentada el año pasado por Mastercard en colaboración con sus socios del sector público y privado.
Desde su lanzamiento, se han hecho más de 32,500 viajes en buses con esta tarjeta, una experiencia digital que les permite a los adultos mayores recibir de forma automática el descuento establecido por ley al utilizar el transporte público, ahorrando tiempo, garantizando mayor seguridad y evitando cualquier inconveniente.
Cuando desarrollamos productos específicos para una población reafirmamos nuestro compromiso con la inclusión financiera. La tarjeta Ciudadano de Oro cuenta con el estándar Touch CardTM, que consiste en una hendidura en el lateral para que las personas con discapacidad visual puedan identificarla al tocarla.
Apoyar los esfuerzos para que los costarricenses pagaran de forma rápida, fácil y segura desde su regreso de la Romería es solo una pequeña mirada hacia el futuro brillante de la economía digital en Costa Rica, en la que los usuarios invertirán menos tiempo pagando y más disfrutando.
Por ello, continuamos trabajando de cerca con el gobierno y con todos los participantes del entorno de pagos, con el objetivo de desarrollar una economía digitalizada integral, donde la dependencia del efectivo desaparezca. Esto no solo aplicará al transporte público, sino a todos los aspectos de la rutina diaria.
En Mastercard apuntamos hacia una Costa Rica digitalizada, inclusiva y próspera, convirtiendo a nuestro país en un referente para toda la región.
Artículo escrito por Kristine Matheson, Country Manager para Costa Rica, Panamá y Nicaragua en Mastercard.
