Karla Herencia presentó una instalación que aborda problemática ambiental de los océanos.
El pasado viernes 2 de agosto se inauguró la segunda edición de la Trienal Internacional de Arte Pictórico en Tijuana, organizada por el Centro Cultural Tijuana (CECUT) con más de más de 100 obras de 15 países, y con representación oficial de Costa Rica con la participación de la artista Karla Herencia.
La artista costarricense presentó su obra “¿Qué son esas manchas que flotan?”, una instalación conformada por pinturas y esculturas realizadas con fragmentos de plástico encontrados en las playas de la zona de Cóbano, Puntarenas.
Abordando el urgente problema de las toneladas de plástico esparcidas en nuestros océanos, el propósito de Herencia con esta pieza es reflexionar sobre la contradicción humana de tener gran ingenio y capacidad inventiva –de la cual el plástico y sus infinitas aplicaciones son ejemplo– y al mismo tiempo ser incapaz de medir y controlar el impacto destructivo de sus propias creaciones.
La obra hace representación de los fragmentos plásticos que flotan en el mar y encallan en la arena, y que son muy atractivos para los animales marinos y las aves las ingieren por accidente. Metafóricamente, Herencia habla de la capacidad seductora de estos materiales, de cualidades versátiles y resistentes, en la que se tejen las contradicciones de nuestra época en torno a lo que el plástico soluciona en nuestra vida diaria, pero al mismo afecta la vida y contamina el entorno.
Sobre su obra Herencia señaló:
Aunque todos sabemos en términos generales que hay plásticos flotando en el océano, es muy diferente cuando se vive en la zona y además se ve el impacto real y cotidiano. Los sientes en el cuerpo. Esto lo descubro en mis caminatas diarias en la playa, que cada vez más tiene más plásticos, y también gracias al diálogo con esfuerzos colectivos de la zona que buscan alternativas para atender esta problemática”.
Según indicó la artista la obra surge de interrogantes, de la curiosidad por el entorno y de la acción constante de recolectar plásticos descartados en las playas de Costa Rica, el cual es promovido como uno de los mejores destinos turísticos por su naturaleza y playas. De hecho, los fragmentos de plásticos incluidos en la obra fueron recogidos en un plazo de dos años, durante recolecciones particulares y también de una colaboración con la ONG a favor de la preservación de la calidad del agua en el sur de la Península de Nicoya, Nicoya Peninsula Waterkeeper, en Cóbano.
La artista busca que con su obra las personas reflexionen sobre las diferentes aristas de la creación humana y un problema ambiental que va en aumento y que nos está enfermando a todos. Es por esta razón que, en esta obra suspendida entre los límites de la pintura y la instalación, Herencia incorpora residuos plásticos como pintando en el espacio, creando un espacio multicolor, al mismo tiempo que convierte una realidad en obra pictórica. Herencia añadió:
Preguntarme ¿Qué son esas manchas que flotan? y adentrarme en este proyecto que más que una obra es un viaje de reflexiones, me llevo a descubrir el impacto de los microplásticos. Es urgente crear conciencia sobre el impacto de este material en los océanos. Desde aparición del plástico en la economía mundial, este material ha venido invadiendo silenciosamente los océanos y playas del planeta, hasta llegar a niveles inimaginables en la actualidad. Este material ha conformado inclusive, grandes islas en medio de los océanos que concentran miles de toneladas de plástico y también está presente por todo el planeta”.
La exposición está abierta a todo público de manera gratuita en el Centro Cultural Tijuana, México, hasta febrero 2025.