El país obtuvo un puntaje de 65,2 en el Índice Inclusión Financiera del BID.
Un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) señaló que la utilización de servicios financieros digitales ha experimentado un rápido crecimiento de Centroamérica, Panamá y República Dominicana en los últimos cinco años, con el porcentaje de adultos en la región que son propietarios de cuentas de dinero móvil duplicándose del 4% al 8% entre 2017 y 2021.
El informe “Hacia una mayor inclusión financiera para el desarrollo”, destaca que las plataformas digitales facilitan el ahorro, mejoran la seguridad, la rapidez, y reducen los costos asociados con los pagos domésticos y remesas internacionales, lo que es especialmente relevante en la región, donde los hogares más vulnerables dependen de las remesas.
El estudio destaca el número de cuentahabientes de dinero móvil y de pagos digitales, lo que representa un avance en inclusión financiera de empresas y hogares en la región y una puerta de entrada a otros productos y servicios financieros, con una menor dependencia de la infraestructura bancaria tradicional.
A pesar de los avances, la región enfrenta desafíos para cerrar brechas con otras partes del mundo en términos de adopción de herramientas financieras digitales, así como en otras políticas que influyen positivamente en la inclusión financiera. Estas incluyen el desarrollo de una estrategia nacional de inclusión financiera, la educación financiera, el impulso a la competencia, y mejora en la tasa de recuperación de los créditos ante impago. Otros retos son el acceso a la información crediticia de los deudores, la eficiencia administrativa de las instituciones financieras mediante el uso de corresponsales y las plataformas digitales de pagos.
Para el caso de Costa Rica el país obtuvo un puntaje de 65,2 en el Índice Inclusión Financiera, lo cual se encuentra cuatro puntos porcentuales por arriba del promedio de América Latina y Caribe (61), y ubica al país en el tercer lugar de América Latina, siendo superada únicamente por Brasil y Chile.
Dato D+: El Índice Inclusión Financiera mide nueve indicadores para las categorías de “Disponibilidad”, “Uso” y “Acceso” de servicios financieros, con el fin de analizar el grado de inclusión financiera de los hogares, y da una puntuación de 0 a 100, donde un mayor valor representa mayor inclusión financiera, con datos al 2021.
Para los subíndices del IIF de "Uso y Acceso" el país lidera la región y se encuentra por encima del promedio de América Latina, con puntuaciones de 42,3 y 70, mientras que para la categoría de "disponibilidad" Costa Rica aparece detrás de Panamá, con una puntuación de 82,6, un punto por debajo del promedio de América Latina.
Adicionalmente, se destacó que Costa Rica también sobresale en la región por contar con lineamientos para cerrar las brechas de género en la inclusión financiera. El Sistema Nacional de Pagos Electrónicos (Sinpe) y su aplicación móvil (Sinpe Móvil) es una medida positiva para promover la inclusión financiera.
Además, el BID destacó que han apoyado a Coopenae y Coopeservidores con financiamiento para potenciar los esfuerzos de ambas cooperativas para reducir el déficit habitacional en Costa Rica, expandiendo el financiamiento de la vivienda social, especialmente dirigida a un segmento de la población tradicionalmente desatendido.
El gerente general del BID para la región de Centroamérica, México, Panamá, República Dominicana y Haití, Tomás Bermúdez señaló:
En nuestra región es clave promover políticas para impulsar la disponibilidad y el acceso a servicios financieros, tales como el crédito, el ahorro, pago de servicios, entre otros, que permiten a las empresas crecer y a los hogares invertir en actividades económicas, educación y salud”.
En esta región, en promedio, 35% de las empresas declaran estar restringidas financieramente, con mayor frecuencia que el promedio en América Latina (30%). Por su parte, en los hogares, la región tiene en promedio un nivel de inclusión financiera estimada de 42% del promedio de los países de ingreso alto de la OCDE. Este promedio es el resultado de analizar la disponibilidad, uso y acceso de servicios financieros, como cajeros automáticos, sucursales bancarias, cuentas, tarjetas, préstamos, ahorros y pago de servicios públicos y salarios a través de una institución financiera, entre otros. La región se encuentra por debajo de América Latina (61%), a excepción de Costa Rica con un 65%.
El informe presenta propuestas para profundizar la inclusión financiera en los países, tales como robustecer el desarrollo de nuevas estrategias de inclusión financiera, fortalecer la educación financiera dentro de la escuela en etapas tempranas y el impulso a los servicios financieros digitales.