Tremor y ruido del volcán cesó abruptamente, lo que podría augurar una erupción explosiva
Las autoridades del Área de Conservación Central (ACC) del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) ordenaron cerrar temporalmente el Parque Nacional Volcán Poás para los turistas este jueves 11 de abril.
Según informó el Minae en un comunicado de prensa, la medida preventiva se debe a los informes emitidos por el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori-UNA) la mañana de hoy, que señalan un aumento en la actividad eruptiva del volcán, con la pluma alcanzando una altura de más de 500 metros sobre el cráter. Además, se han observado cambios en la actividad sísmica, lo que incrementa la posibilidad de una erupción freática que podría proyectar sedimentos ácidos y rocas hacia el área del mirador, así como otras zonas circundantes.
El cierre del parque implica la reprogramación de visitas para los turistas afectados, quienes pueden solicitar el reembolso de su dinero a través del correo electrónico [email protected].
El ministro de Ambiente y Energía, Franz Tattenbach Capra, enfatizó que esta medida se toma en base a criterios técnicos para garantizar la seguridad de visitantes, guías de turismo y funcionarios, y que se mantendrá un monitoreo constante del volcán en coordinación con entidades especializadas y la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).
El Ovsicori informó que el volcán Poás registró una erupción pasiva de cenizas y gases volcánicos desde las 6:00 a.m., con un aumento notable en la emisión de estos materiales a partir de las 9:00 a.m. Asimismo se ha detectado una concentración significativa de dióxido de azufre en el Mirador, junto con cambios en el tremor de fondo, lo que sugiere la posibilidad de una erupción freática más intensa.
El vulcanólogo Cyril Müller destacó el rápido cambio en la composición de la pluma volcánica, con un incremento de cenizas y erupciones intermitentes, así como el cese repentino en la actividad sísmica y acústica, lo que podría indicar un bloqueo en el sistema volcánico o una purga de agua de los conductos, con posibles escenarios de erupción explosiva o emisiones continuas de cenizas.