San José ha sido, desde hace años, el epicentro de eventos literarios que han enriquecido nuestra cultura. En el corazón de estas actividades, destaca el Complejo Cultural La Antigua Aduana, un espacio que ha sido testigo del auge de la literatura costarricense y que se ha convertido en un punto de encuentro esencial para los amantes de las letras, tanto nacionales como internacionales. La Fiesta de la Lectura, celebrada en este posicionado complejo literario, se ha transformado rápidamente en una tradición que trasciende fronteras, atrayendo a escritores, poetas, académicos, lectores entusiastas, amén de pequeñas y medianas editoriales.

La pasión por la literatura se manifiesta en cada rincón de La Aduana, donde se han realizado desde dramáticas sesiones de narración oral hasta profundos debates literarios. La Antigua Aduana es más que un espacio; es un símbolo de la cultura y la historia de nuestra capital. Su arquitectura emblemática y su capacidad para acoger a numerosos expositores y asistentes la hacen el lugar idóneo para nuestro evento literario. La amplitud de su estructura, que se extiende por más de 150 metros, ha permitido que generaciones de artistas y amantes de la literatura se reúnan bajo un mismo techo, compartiendo y celebrando la riqueza de nuestras expresiones culturales.

El patrimonio cultural no solo define la identidad de un pueblo y forma parte de su historia, sino que también es una fuente de cohesión social y orgullo colectivo. Además, puede convertirse en un activo económico vital que impulse el desarrollo sostenible. Proteger espacios como la Antigua Aduana no solo preserva la riqueza cultural y artística para las generaciones actuales y futuras, sino que también promueve la inclusión social y el crecimiento económico a través del turismo urbano y las industrias literarias creativas.

Trasladar nuestro evento a un espacio más pequeño no solo limitaría la participación de los expositores, sino que también disminuiría la experiencia de los asistentes. La Antigua Aduana ofrece un ambiente único, irreplicable; sus muros han sido testigos del intercambio de ideas y la pasión por las letras que define a nuestro exuberante y robusto sector literario. Es aquí donde debemos continuar construyendo nuestro legado, preservando la esencia que hace único a un evento de esta naturaleza.

Mantener nuestro evento en la Antigua Aduana es una declaración de nuestros valores y nuestra dedicación al crecimiento y enriquecimiento de nuestra literatura. Por estas razones, instamos a considerar la importancia de este lugar, no solo como un recinto, sino como el órgano vital de nuestra comunidad literaria.

Con la inminente llegada del fenómeno de La Niña, se espera que Costa Rica enfrente condiciones climáticas adversas en agosto, incluyendo lluvias intensas y posibles inundaciones. Estas condiciones pueden impactar significativamente eventos al aire libre que no cuenten con protección adecuada contra los elementos.

La ubicación central y la accesibilidad de la Antigua Aduana han sido factores clave para la alta asistencia en eventos anteriores. El CENAC, aunque es un complejo cultural importante, puede no ser tan accesible para el público general, lo que podría resultar en una disminución de la participación.

En resumen, la Antigua Aduana es preferible no solo por su capacidad y significado histórico, sino también por ser la opción más segura y práctica frente a las proyecciones climáticas y las necesidades logísticas de nuestro evento literario.

Proponemos un diálogo entre las partes organizadoras: el CPAC del MCJ y Convergencia Literaria que representan al sector literaria de pequeños y medianos emprendimientos literarios para encontrar una solución que beneficie a todos.

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