Personas expertas dan recomendaciones a quienes se encuentran en búsqueda de empleo.
Se enfrentan a una serie de brechas, buscan cada vez más un balance con su vida personal y no lo piensan mucho para cambiar de empleo. Según las personas profesionales en Orientación, así son quienes integran la fuerza laboral costarricense y que conmemoran el Día Mundial del Trabajo este 1 de mayo.
Además, de acuerdo con datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) recopilados por Statista este 2024, los costarricenses emplean 42,5 horas semanales para laborar, ubicándose de sextos en un ranking latinoamericano realizado por esta firma internacional.
Osvaldo Murillo, representante del Colegio de Profesionales en Orientación (CPO) explica que “la fuerza laboral actualmente no es homogénea, existen brechas en accesos a posibilidades de formación que impiden a las personas prepararse en la incursión al mundo del trabajo por un lado y por otro, al mantenimiento y progreso laboral exitoso”.
El experto se refiere por ejemplo a las personas que no tienen acceso a los recursos tecnológicos y que se van quedando atrás en el proceso de reclutamiento o en el conocimiento de los cambios constantes que experimenta un panorama laboral tan dinámico como el actual; que promueve en muchos casos la informalidad.
Murillo asegura que estas desigualdades se presentan más en las zonas fuera del Gran Área Metropolitana (GAM), afectando en mayor cantidad a las mujeres y a otros colectivos, como la población con discapacidad.
Por otra parte, conforme se van incorporando nuevas generaciones, va existiendo cada vez más una mayor preferencia a buscar un balance entre el trabajo y la vida personal, lo que influye en las necesidades que las personas buscan satisfacer en las organizaciones.
“Ya no es tan común encontrar esa cultura en la que todos dan la milla extra e inician a trabajar pensando en quedarse por un gran periodo hasta incluso jubilarse, por eso es que muchas empresas e instituciones realizan diferentes esfuerzos para incentivar a su equipo, buscando disminuir la rotación de personal”, agrega Murillo.
De hecho, es común el fenómeno de los “empleos trampolín”, que son aquellos puestos que las personas aceptan para adquirir experiencia, desarrollar habilidades y obtener conocimiento técnico con miras a encontrar otra opción laboral que cumpla todas sus expectativas, que incluso puede ser un emprendimiento.
La Encuesta Continua de Empleo del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) muestra que la población con empleo para el trimestre finalizado en enero del presente año, fue de 2.118.409 personas, de los cuales un 62,6% son hombres y el restante 37,4% mujeres. De la cifra total, aproximadamente 1.600.000 personas tenían empleos asalariados, mientras que 502.000 eran independientes.
Las actividades económicas con mayor ocupación son comercio y reparación con 16,6% y la industria manufacturera y el sector de enseñanza y salud que juntas representan el 24,1% de las personas con empleo en Costa Rica. Por otra parte, el 37,5% de quienes participaron en la encuesta se dedican a trabajos informales.
En cuanto al mercado laboral, el representante del CPO afirma que existe un desfase entre la demanda de los empleadores y la preferencia de elección de carreras, pues hay una mayor tendencia a escoger carreras de las ciencias sociales como comunicación, derecho, psicología, educación, entre otras; mientras que la mayoría de vacantes disponibles se encuentran en el área STEAM (ciencia, tecnología, ingeniería, artes y matemática por sus siglas en inglés).
También son muy atractivas las carreras que combinan sectores, por ejemplo la tecnología aplicada a las ciencias de la vida, como imagenología médica.
Como lo indicó el año anterior el Observatorio Laboral de Profesiones (OLAP) del CONARE con base en los estudios de seguimiento a personas graduadas, entre las disciplinas con mejores indicadores de empleabilidad están Estadística, Microbiología, Derecho Penal, Meteorología y Farmacia; mientras que quienes se gradúan de Ciencias Actuariales, Ingeniería en Computadores, Ciencias de la Computación, Microbiología y Farmacia, entre otras, perciben los mejores salarios del mercado.
La otra cara de la moneda
La Encuesta Continua de Empleo del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) anteriormente mencionada, estimó que actualmente existen 183 mil personas desempleadas, de las cuales, 104 mil son hombres y 79 mil mujeres. En comparación con el mismo periodo del año anterior, la población desempleada nacional disminuyó en 105 mil personas: 35 mil hombres y 69 mil mujeres. La tasa de desempleo nacional fue de 7,9%.
Ante el escenario de desocupación laboral, el representante del CPO afirma que existe muy poca educación y preparación para la búsqueda de empleo.
Para quienes se encuentran en esta situación las y los profesionales en Orientación brindan las siguientes recomendaciones:
- La persona debe conocerse a sí misma, plantearse qué es lo que quiere y hacia dónde quiere ir. Esa falta de claridad se hace evidente en el currículum vitae y las entrevistas laborales, lo que juega una mala pasada en el proceso. Debe tomar en cuenta también sus intereses, deseos y sueños.
- En esta misma línea, se debe conocer adecuadamente cuáles son las destrezas y habilidades, pues suele suceder que en la hoja de vida se coloca las que se consideran más atractivas, aunque las personas no necesariamente cuenten con las mismas. Se deben comparar estas habilidades con las que demanda el mercado laboral para analizar cuáles debe fortalecer o desarrollar de cero. Definir esto requiere un proceso guiado que le permita explorar la experiencia personal y a partir de ahí, extraer las enseñanzas que le han dejado las diferentes lecciones de vida, que no necesariamente tienen que ser en el plano académico o laboral.
- Toda esta información se debe plasmar en instrumentos que sirvan para tocar las puertas de las empresas tal como como cartas de presentación de ofertas que se envían aunque la empresa no haya anunciado que tiene vacantes disponibles. El currículum debe ser personalizado al lugar y/o sector al que se va a enviar.
- Prepararse adecuadamente, por una parte, desarrollando un buen contexto laboral y definiendo un proceso sistemático y estructurado de búsqueda de empleo de acuerdo con sus propias características y posibilidades; y por otro, cuidando la presentación personal y el conocimiento adecuado de la organización cuando ya realice las entrevistas de trabajo.
- Buscar profesionales que le puedan guiar como las orientadoras y los orientadores, quienes tienen la preparación para realizar un proceso de Orientación laboral y que acompaña a las personas para que muestren sus aspectos fuertes mediante un currículo o en una entrevista de empleo.