Ausencia de la laguna facilita que los gases pulvericen la roca y creen ceniza
La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) declaró este lunes el estado de alerta verde para seis cantones de la provincia de Alajuela debido a la caída de ceniza y presencia de gases asociados a la actividad del Volcán Poás.
Walter Fonseca Bonilla, jefe de Gestión de Operaciones de la CNE firmó la declaratoria de alerta que regirá para los cantones de Poás, Grecia, Sarchí, Zarcero, Naranjo y el cantón central de la provincia.
El coloso alajuelense ha estado emitiendo ceniza de forma casi permanente desde el Viernes Santo cuando se reportaron dos erupciones en horas de la noche. Asimismo, localidades aledañas han reportado intenso olor a azufre y en las viviendas y vehículos empieza a notarse una capa de fina de material.
Geoffroy Avard, vulcanólogo del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori-UNA) explicó este lunes que el comportamiento del volcán sigue el mismo patrón que el visto en el año 2019, cuando la laguna se secó y el gas comenzó a fracturar las rocas, causando emisiones de ceniza.
El volcán en sí mismo no ha experimentado realmente un cambio de comportamiento, ya que sigue dentro de una tendencia general muy similar a la de 2019. Sin embargo, lo que hemos observado es una nueva manifestación de emisión de ceniza. La emisión de ceniza consiste en roca pulverizada.
"Lo que hemos presenciado la semana pasada es similar a lo que observamos en 2019: primero, el nivel del agua [del lago] disminuyó hasta desaparecer. Luego, cuando la salida de gas se secó por completo, el gas comenzó a fragmentar la roca y a emitir ceniza. Esto comenzó a partir del Viernes Santo, con dos erupciones un poco más energéticas durante la noche, y desde entonces hemos tenido una emisión casi continua de ceniza. Por lo tanto, no es una sorpresa, ya que era bastante esperado debido a lo que observamos en 2019 y sigue el mismo patrón", explicó.
El experto recordó que los gases y la ceniza volcánica es irritante y abrasiva por lo que las personas deben protegerse y tomar medidas para que el material entre a las casas.
Cuando el aire exterior mejore, es recomendable abrir las ventanas para permitir la entrada de aire de mejor calidad. Si experimentan mucha molestia, es importante no exponerse a este tipo de manifestación, ya que puede ser irritante para la salud.
El boletín de alerta de la CNE destacó que en los últimos días debido al poco o nulo aporte de lluvias en la cima, la laguna ha desaparecido, además el viento y la poca humedad en la atmosfera, favorecen que los productos propios de este volcán activo salgan directamente a la atmosfera, y sean desplazados a lugares más alejados, alcanzando comunidades de los alrededores.
De acuerdo con la estación ExpoGAS, que se puede consultar en el sitio web del Ovsicori, el mirador del volcán reportó picos elevados de concentración de dióxido de azufre (SO2) a las 10:00 a.m. En ese momento, el nivel justificó la activación de la sirena y el cambio del semáforo a rojo. Además, se registraron otros dos picos de nivel rojo alrededor de la 1:30 p.m.
Dato D+: El semáforo de alerta por gases en el mirador del volcán Poás tiene cuatro niveles: azul, cuando la concentración es baja (menor a 0.4 partes por millón de dióxido de azufre); naranja, cuando la concentración es moderada (entre 0.4 y 2 partes por millón de dióxido de azufre) y rojo cuando la concentración es alta (mayor a 2 partes por millón). Adicionalmente sonará la sirena de evacuación si la concentración supera las 5 partes por millón.
La CNE informó pasadas las 3 de la tarde que por el momento el parque se mantendrá funcionando con normalidad, sin embargo, cuando la afectación por gases sea muy alta, el mismo será cerrado momentáneamente mientras baja la concentración de estos.