En el marco del Día Mundial de la Felicidad, que se celebra el 20 de marzo, es importante destacar la importancia de la gratitud como un factor clave para el bienestar mental y la felicidad.
“La gratitud es la capacidad de apreciar las cosas buenas de la vida, tanto grandes como pequeñas. Es un sentimiento de agradecimiento por las personas, las experiencias y las cosas que nos hacen felices”, explicó Rocío Aguilar, directora de la Carrera de Psicología de la Universidad San Marcos.
Es gracias a ese efecto, que la gratitud se reconoce como una de las herramientas más efectivas para aumentar la sensación de bienestar, lo que se traduce en mayor felicidad.
Según la experta, la gratitud va más allá de la acción de decir gracias, y radica en la capacidad de percibir con mayor facilidad los acontecimientos positivos en la vida, lo que se tiene y lo que se puede hacer, así como reconocer el aporte de las personas con las que se interactúa diariamente; de ahí que quienes tienen la capacidad de identificar todo aquello por lo que se debe agradecer, suelen tener pensamientos más positivos y, por ende, mayor sentimiento de felicidad.
¿Cómo la gratitud beneficia la salud mental?
La investigación científica ha demostrado que la gratitud tiene un impacto positivo en la salud mental. Para la psicóloga, algunas de las formas en que la gratitud beneficia a las personas son:
- Reducción del estrés y la ansiedad.
- Aumento de la felicidad y el bienestar general.
- Mejora la calidad del sueño.
- Fortalecimiento de las relaciones sociales.
- Promoción de la resiliencia.
Para lograr tener días más felices y mantener una salud mental sana, Aguilar brinda varias prácticas que permiten de cultivar la gratitud en la vida diaria, entre ellas están:
- Llevar un diario de gratitud.
- Escribir cartas de agradecimiento a las personas que son importantes para cada uno.
- Compartir con otros los eventos que le generan agradecimiento.
- Realizar actos de bondad y generosidad.
- Practicar la atención plena y enfocarse en las cosas positivas de la vida.
Existen muchos otros métodos que las personas pueden practicar para ejercer la gratitud, lo más importante, es que se logre crear un hábito de manera que los sentimientos de gratitud y felicidad se mantengan lo más estables posible.