Cada inmueble ganador recibirá un monto máximo de 125 millones de colones para su restauración y puesta en valor.

La convocatoria a la XXVII edición del certamen Salvemos Nuestro Patrimonio Histórico-Arquitectónico está abierta con la novedad de que en 2024 serán dos las edificaciones públicas patrimoniales las que obtendrán para su restauración hasta un máximo de 125 millones de colones cada una.

Así lo indicó Verónica Solórzano, arquitecta del Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural, quien está a cargo del certamen.

“Para esta edición se definieron dos premios iguales, por cuanto existen muchas edificaciones públicas que, por sus dimensiones, permiten que las inversiones no sean muy cuantiosas para su recuperación, beneficiándose dos poblaciones en lugar de una.  De esta manera, el objetivo del certamen Salvemos Nuestro Patrimonio Histórico-Arquitectónico, de recuperar y poner en valor las edificaciones patrimoniales, se ve mayormente reflejado”, apuntó.

Por otra parte, el profesional en Arquitectura, Ingeniería Civil o en Construcción, o bien, el grupo de profesionales proponente de cada anteproyecto ganador, obtendrá como premio 12.500.000 colones.

Este es un certamen anual que realiza el Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura y Juventud con el fin de destinar fondos públicos a la restauración del patrimonio construido del país.

Certamen ha recuperado 26 inmuebles patrimoniales a la fecha

Desde 1997 a 2023, periodo en que se ha realizado ininterrumpidamente, 26 inmuebles patrimoniales han sido restaurados gracias al premio, mientras que otros dos: Casa Lindo (actual Centro Cultural Key Largo) en el centro de San José y la Casona de la Hacienda San Luis, en Cañas, Guanacaste; están pendientes para iniciar obras en el presente año.

El primer inmueble patrimonial elegido como ganador de Salvemos Nuestro Patrimonio Histórico-Arquitectónico en 1997, fue la Casa Zúñiga Clachar, ubicada en la Calle Real de Liberia, Guanacaste.

Esta es una antigua y señorial casona de construcción en tierra que aún pertenece a la familia, no obstante, funciona actualmente, y desde hace varios años, como local comercial bajo alquiler. Esto demuestra que un inmueble con declaratoria patrimonial puede ser utilizado con diferente uso al original y que, también, como todo bien privado, puede ser alquilado o vendido según la voluntad de su propietario.

En veintiséis años consecutivos de su ejecución muchas comunidades se vieron beneficiadas con la inversión a sus más valiosos edificios, así, por ejemplo; la Casa Misionera de la Iglesia Bautista, en Limón; la Casa Faith en Puntarenas centro; la Escuela Juan Ramírez Ramírez, en Tobosi de El Guarco, Cartago y la Antigua Estación del Ferrocarril en Turrialba, esta última recientemente restaurada y funcionando como cafetería.

Uno de los edificios que recibió inversión clave para su mantenimiento y conservación, fue el Colegio Superior de Señoritas, ganador de la edición 2020.

Este valioso inmueble, que cuenta con más de 130 años de construido y es un ícono de la educación femenina costarricense, requería urgentemente de una solución a los problemas de filtración de humedad en sus paredes y azotea, además de la recuperación de sus ventanas de madera y la sillería de piedra de su fachada, todo lo cual fue posible gracias al monto otorgado por el certamen Salvemos Nuestro Patrimonio Histórico-Arquitectónico.

“El trabajo que se hizo fue la recuperación de la loza de la azotea del edificio, que significó un alivio total de lo que era la filtración de humedad de la parte superior hacia abajo y, por otro lado, el de recuperar las paredes y la parte del sótano, que es el cimiento del Colegio Superior de Señoritas, y que estaba en muy mal estado. Se logró controlar la humedad que estaba dañando a un edificio de más de 132 años”, expresó el arquitecto Jorge Omar Vega, quien fue parte del grupo de profesionales ganador en 2020.

“El impacto para la población que atiende este colegio fue muy positiva, tanto para el profesorado como para el alumnado. Todas las partes quedamos muy satisfechas”, concluyó Vega.

Los anteproyectos concursantes se recibirán los días 18 y 19 de abril de 2024 entre las 10 a. m. y las 4 p. m. en el Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural, ubicado 50 metros oeste de la fuente de la Plaza de la Cultura, avenida central, San José. No obstante, las personas que residen fuera de la Gran Área Metropolitana pueden entregar la documentación por medio del correo: [email protected]

Para mayores detalles se invita a consultar las bases de participación en el sitio web: www.patrimonio.go.cr