Marianella Barquero es una de las 173.000 mujeres clientas del BN que lideran una micro, pequeña y mediana empresa.

La Ferretería Barull, ubicada en Pacayas de Cartago, es el negocio con el que dos mujeres empresarias incursionaron en un mercado tradicionalmente comandado por hombres.

Marianella Barquero es una de las dos propietarias de este negocio que, junto a su socia y el Banco Nacional, logró convertir su sueño de emprender en una realidad.

Según indicó la empresaria, el proyecto arrancó en época de pandemia con varias personas cercanas que se quedaron sin trabajo a causa de la COVID-19:

Vimos que existía una necesidad en el mercado, en Pacayas de Cartago. La gente necesitaba una ferretería y por eso, junto con varios amigos que quedaron desempleados en la pandemia, decidimos unirnos, sumar la experiencia que todos teníamos y trabajar para abrir nuestro negocio propio”.

Esta ferretería actualmente emplea a nueve personas y opera como una pequeña y mediana empresa (PYME).

Marianella Barquero es una emprendedora de Pacayas de Cartago, que abrió su ferretería Barull en medio de la pandemia con el apoyo del BN.

La empresaria, cliente de la entidad financiera, también señaló que:

Yo al Banco Nacional lo tengo en mi memoria desde los seis años. Recuerdo cuando mi papá me llevó a abrir una libreta de ahorros, desde entonces siempre he trabajado con el banco. Antes de la ferretería yo trabajaba en la agricultura, y tuve el apoyo de un crédito con ese negocio. Luego, busqué nuevamente al BN para que me ayudara con el préstamo para la ferretería y ahora aquí estamos, con nuestro nuevo negocio”.

Barquero recibió un crédito de parte del Banco Nacional cuyos fondos provienen de la compra del primer bono social de Costa Rica por $75 millones, cuya emisión fue comprada por BID Invest y FinDev Canada.

Estos recursos se destinaron para que el BN preste dinero a micro, pequeñas y medianas empresas en todo el país con el objetivo de dinamizar la economía, generar empleo e impulsar el desarrollo. El banco indicó que el 40% de esos fondos deben colocarse en manos de mipymes lideradas por mujeres, como es el caso de la ferretería Barull.

Según indicó la directora de Relaciones Institucionales y Sostenibilidad del BN, María Brenes:

Los mercados financieros están evolucionando en forma innovadora y con este nuevo tipo de bonos sociales participamos del esfuerzo global para financiar proyectos sostenibles con el fin de reducir la pobreza en todo el mundo. En Costa Rica, esta emisión beneficia la banca inclusiva que empodera y brinda mayor participación económica de las mujeres y las mipymes. Ambas son esenciales para generar empleo y bienestar en el país”.

Más del 30% de la cartera de crédito del Banco Nacional está en manos de PYMES, a las cuales se les brinda una plataforma de acompañamiento y educación virtual llamada PYME Nauta, donde aprenden habilidades y herramientas para sacar adelante sus negocios.

El BN cuenta con una cartera de crédito de ¢4,7 billones en diversas actividades que movilizan la economía nacional. A octubre de 2023, el banco registró un crecimiento de 6,5% en esta cartera, lo que lo coloca como el principal en el sector financiero costarricense, con 2,6 millones de clientes que representan el 50,5% de la población total.

Además, y por medio del programa BN Mujer, el banco brinda apoyo extra a las mujeres, no solo facilitándoles soluciones financieras, sino también asesoría personalizada para que potencien sus negocios y se capaciten en diversos ámbitos como el técnico, emocional, salud y habilidades blandas.