Arias afirma que proyecto, traído abajo por la Sala IV, le recuerda a la discusión nacional de 2007 sobre el TLC

El presidente de la Asamblea Legislativa, Rodrigo Arias Sánchez rechazó este jueves en conferencia de prensa la idea de presentar como proyecto nuevo el mismo texto de la iniciativa de jornadas 4x3 que recibió un zarpazo de la Sala Constitucional el martes, al señalar un vicio fatal de procedimiento legislativo cometido durante el anterior periodo constitucional.

Arias inició su diálogo con los medios señalando que durante toda su vida en la función pública ha seguido el concepto de que las sentencias judiciales se respetan, pues son parte de la democracia costarricense, y en ese sentido afirmó que el pronunciamiento de la Sala IV sobre el proyecto de jornadas extraordinarias debía ser respetado.

Como ustedes saben fue un vicio que se produjo en la Asamblea anterior, la Sala dice que durante la tramitación del proyecto [en mi presidencia] no se encontraron vicios, lo cual para mí me satisface".

El presidente legislativo afirmó que a su parecer el proyecto de jornadas se ha ido polarizando o satanizando de alguna forma y dijo que le recuerda al debate nacional de 2007 sobre el Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos:

No sé si ustedes se acuerdan de los años 2007 cuando se discutía el TLC que las fuerzas se fueron polarizando en el 'No' y el 'Sí'; habían cada vez más argumentos y se fueron polarizando hasta que se llegó a un referendo final. Me parece que aquí sobre este proyecto igual se han dicho muchas cosas a favor o en contra que no son todas apegadas a la verdad. Entonces mi impresión es que si ese proyecto se vuelve someter así como está ahora, pues va a producir otra vez el enfrentamiento, probablemente algunos diputados ejerzan el derecho de presentarle miles de mociones y no vamos a avanzar mucho sobre eso".

Arias señaló que quisiera y considera que es casi una obligación suya como presidente hacer un ejercicio donde prevalezca la concertación en vez de la confrontación, particularmente en momentos donde el país necesita de la aprobación de proyectos de ley en materia de seguridad, lo cual podría verse obstaculizado si la iniciativa de jornadas extraordinarias vuelve a ponerse en la agenda legislativa:

"Si a esa prioridad [seguridad ciudadana] le ponemos la urgencia de ver proyectos sociales que mejoren la generación de empleo, etcétera, pues yo creo que volvernos a meter en una confrontación que dure meses en un proyecto que a lo mejor sentimos que no va a caminar... lo más sensato es ponernos a tratar de ver cómo podemos concertar algo en vez de confrontar en las mismas fuerzas y yo en eso me me voy a ofrecer como presidente, me parece que es mi responsabilidad y mi rol tratar de conversar con todas las fracciones, conversar con el gobierno, conversar con algunos sectores sociales, empresariales, y ver si podemos en este tema construir algo sensato, algo tal vez más reducido, algo tal vez más práctico, que realmente pueda satisfacer las necesidades urgentes que tiene el país de que la inversión extranjera no se sienta limitada por las opciones de Costa Rica", declaró.

Arias insistió en que la salida de este problema no es analizar el mismo proyecto que ya se sabe es rechazado por un grupo y aceptado por otro, sino construir algo que logre el mismo propósito para el país, pero quite las dudas que ya existen entre las personas que se han opuesto a la iniciativa.

Asimismo el presidente legislativo señaló que considera necesario, antes de volver a analizar el proyecto de ley, recibir la redacción completa de la sentencia de la Sala Constitucional y así definir una hoja de ruta.

Opuesto a reforma sobre extradición

Arias confirmó además que él votaría en contra de la reforma constitucional presentada por diputados del oficialismo que pretende habilitar la extradición de nacionales, al señalar que considera no es la solución para el problema de seguridad que vive el país.

El origen del problema es que hay personas extranjeras vinculadas al narcotráfico que se casan con costarricenses y que entonces adquieren nacionalidad costarricense, y aquí [en la reforma constitucional] se considera que entonces, a raíz de eso, debe habilitarse la posibilidad de extraditar costarricenses para todo el mundo... Me parece que eso es como matar una mosca con una ametralladora. En ese caso hay un proyecto que yo presenté junto con otros diputados para reformar la Ley de Extranjería y Naturalización que es más fácil, que ya está en la agenda legislativa, que lo podamos votar en estos días, que establece que si una persona que se ha casado con una costarricense y se la encuentran vínculos con el narcotráfico ese matrimonio se puede anular.

La reforma constitucional sigue en su etapa de discusión de admisibilidad en el Plenario, sin embargo, se ha visto interrumpido constantemente por rupturas de quórum o porque el Plenario acuerda realizar otras actividades o debatir otros asuntos los días miércoles, que corresponde llevar a cabo ese debate.