¿Se ha preguntado si para ser un buen líder se debe ser un buen comunicador/a?, y al revés, ¿Se puede decir que un buen comunicador/a es un buen líder? ¿Qué opina?
Para tratar de contestar estas preguntas puedo contar anécdotas en donde me he encontrado con gerentes de empresas multinacionales, los llamados “managers”, que distan mucho de ser buenos líderes, y también me he encontrado en pequeñas y medianas empresas donde los buenos líderes no son, ni tienen puestos de gerencias o jefaturas. Y entonces, ¿cómo podemos encontrar un buen líder que además sea un buen comunicador/a?
Y para agregar un poco más de “carnita”, ¿el comunicador se hace o nace? Este debate me encanta en las aulas donde están “formándose” los comunicadores del futuro, pero que, a la hora de ejercer esta habilidad aprendida, fallan en el intento, no por falta de conocimiento sino, por falta de habilidad natural para comunicarse.
Pero, para aterrizar, un líder puede aprender a transmitir no sólo ideas, sino también, su propia energía, entonces algunos aspectos en los que se puede enfocar para impactar positivamente a la organización y su carrera serían:
- Implementar la comunicación en persona o cara a cara, verbal.
- Saber desarrollar —o aprender sobre— la comunicación asincrónica, la que no espera respuesta inmediata, saber manejarla y gestionarla.
- La comunicación no verbal, estar consciente de todo lo que decimos con el cuerpo.
- Aplicar la escucha efectiva y la escucha activa, aprender a escuchar para entender y no para contestar.
- Resolución de conflictos, adquirir la capacidad de asertividad y manejo de emociones a través de la comunicación.
Se necesita tiempo para desarrollar las habilidades interpersonales como la comunicación, pero si practicamos los hábitos que la complementan, será fácil hacer que se convierta en una gran fortaleza. Si en este momento se encuentra en un posición de ascenso profesional una buena práctica para mejorar su liderazgo y la comunicación de manera simple es comenzar por escribir el diario de la comunicación, un espacio introspectivo donde hacemos un recuento de los aciertos y errores cometidos durante el día en estas dos áreas y así poder ir aprendiendo y mejorando todos los días, ¿se anima?
Este artículo representa el criterio de quien lo firma. Los artículos de opinión publicados no reflejan necesariamente la posición editorial de este medio.