Cuando doy los cursos de comunicación siempre pregunto, ¿saben desde cuándo nos comunicamos? Desde que alguien más, nos siente en su vientre, ese día comienza un proceso de comunicación que no termina. Porque, aunque trascendamos y dejemos el plano físico de este mundo, seguimos comunicando, como les he contado; la ausencia y el silencio también comunican, así que llegamos a este mundo por medio de un útero, en ese momento, inicia nuestro proceso de comunicación nuestro y con la madre.
En todas las clases de psicología, se habla bastante sobre la relación que todos tenemos con nuestra madre, esos meses 7, 8, o 9 en su vientre, genera los primeros vestigios de quien seremos y cómo será nuestra personalidad, nuestra forma de ser, etc., todo aportado eso sí, por genes de ambos padres, obvio, pero, es en la madre que nos formamos. Y nos es poca cosa. Pero eso lo entiendo ahora, que soy mamá. Antes ni me lo imaginaba, ni lo creía.
¿Cómo se comunica nuestra madre?, quienes tenemos la fortuna de tenerla aún con vida, ¿cómo lo hizo? para aquellos que no la tienen, o ¿cómo se imaginan que sería?, para aquellos que no la conocen.
La mamá, es el principio. Para muchos, cuesta entenderlo, es algo que no les gusta, que no ha sido una buena experiencia, no todas las mujeres que se convierten en madres lo disfrutan, bien dicen que la maternidad debe ser consciente y pedida, sino no debe ser. Pero el mundo actual, no da tregua. Hay niñas de trece o doce años, convertidas en madres y eso de ninguna manera es correcto o sano, existen mujeres que deben ser madres porque alguien más decide sobre su cuerpo, mujeres que no quieren, que no lo piden. De la misma manera, hay quienes esperan toda la vida para convertirse en madres con la más grande de las ilusiones, y otras como yo, que no imaginamos estar hoy, como gallinas culecas felices por habernos convertido en madres.
¿Y cómo es esa comunicación? ¿Qué nos enseñó esa figura materna?, puede ser una tía de crianza, la abuelita, o una mamá de corazón, porque también es madre aquella que adopta sin distinción, ¿cuáles fueron los ademanes que nos enseñó y hoy repetimos, las palabras más usadas por ella? ¿Cada cuánto la observamos para entender qué nos dice?
Las mamás se comunican de todas formas, especialmente con acciones, por ejemplo, trabajando, preparando la comida, esperándonos hasta tarde despierta para saber que estamos bien, pensando en nosotros en cada momento, deseando lo mejor, cuidando hasta nuestras mascotas o nietos, cocinando algo especial que sabe que nos encanta, con la mirada fija cuando nos ve irnos sosteniendo las lágrimas, aplaudiendo como loca en la presentación de la escuela, defendiendo como una osa a su cría en el colegio, y también es la que está sentada en la butaca de un auditorio viéndonos retirar nuestros títulos, o esperando en la acera del hospital de niños con el corazón hecho un puño, otras se lo guardan todo. La mamá siempre nos dice la verdad, aunque duela, y eso es la magia, no hay nadie igual.
Tengo amigas que tienen mamás muy cercanas que son como sus mejores amigas, tengo otras que tienen mamás muy frías, separadas de todo, calladas, poco cariñosas y presentes, todo eso comunica, indica y nos da patrones. Lo importante es ser conscientes de que somos ella. Todo lo que hacemos, lo que decimos, decidimos no está para nada lejano de su linaje, el de la mamá, la abuela, bisabuela,etc, está en nuestro ADN. Imposible negarlo. Tenemos ancestras madres conocidas o no, todas las contenemos en nuestro ser, y nos dan su fuerza, su valor, su experiencia y también sus miedos igual que sus errores. Ya viene el día de la madre, buen momento para hablar o recordar, cómo se comunica mi mamá y cómo lo hago, yo.
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