Por Sandra Navarro Castillo – Estudiante de Licenciatura de Economía Empresarial

La Política Económica es una rama específica del conocimiento económico y se utilizan medidas para conseguir determinados fines. Estos se identifican como aquellos propósitos de carácter más general que una sociedad se ha propuesto alcanzar. La Política Economía también tiene objetivos además de la concreción de los fines. Estos implican una cuantificación de lo que se pretenderá lograr para mejorar el bienestar económico o una mayor igualdad entre los ciudadanos. Para lograr los objetivos, los países utilizan instrumentos, son las políticas en función de aquello que desean lograr: los instrumentos más conocidos son la política monetaria y la política fiscal (Cuadrado, 2010).

El instrumento de política fiscal juega un rol fundamental en el desempeño de la economía costarricense. Según Juan Cuadrado (2010), en su libro de “Política Económica”, los instrumentos incluidos dentro de la política fiscal o de finanzas públicas abarcan esencialmente los gastos públicos, los impuestos y la política presupuestaria y de endeudamiento. El ámbito del gasto corresponde tanto a los gastos gubernamentales para suministrar servicios y bienes públicos, como las transferencias para satisfacer necesidades y objetivos sociales. En el de los ingresos se incluyen los distintos tipos de impuestos que los gobiernos establecen, orientados no sólo a recaudar, sino a influir en la distribución de la renta y en la asignación de recursos.

Una de las debilidades estructurales más preocupantes del país son las finanzas públicas y el balance fiscal entre los ingresos y gastos del gobierno. Según la revisión del Programa Macroeconómico, en el primer semestre de 2019 se generó un déficit financiero superior al registrado en igual lapso del 2018. Esto puso de manifiesto una desmejora en las finanzas del Gobierno Central. El deterioro es un reflejo del aumento en los gastos por interés de la deuda. Mientras los gastos crecieron un 9.4% en junio, los ingresos aumentaron solo un 7.9%. Como era de esperarse, y consecuente con el resultado financiero del Gobierno Central, la deuda pública global en términos del PIB continuó su camino creciente y alcanzó un 70,6% en junio de 2019, mientras que la razón de deuda a PIB del Gobierno Central alcanzó casi 55% (Banco Central de Costa Rica, 2019).

Con un panorama tan desalentador, y ante la necesidad de mejorar situación fiscal, fue aprobada la Ley de Fortalecimientos de las Finanzas Públicas y entró en vigencia a partir del 1 de julio del 2019. Esta ley forma parte del instrumento de la política fiscal y trata de mejorar el insostenible incremento del déficit fiscal, mediante la modificación realizada del impuesto sobre las ventas al impuesto sobre el valor agregado, cambios en los impuestos de utilidades y rentas de capital, creación de regla fiscal para la contención del incremento del gasto, entre otros (Grupo Camacho Internacional, 2019).

Como toda política económica, tiene efectos en el corto, mediano y largo plazo. El efecto que espera tener el Gobierno y Hacienda Pública en el mediano y largo plazo, en definitiva, es aumentar los ingresos públicos por medio de la recaudación de impuestos, disminuir el rubro y crecimiento del gasto público y, por consiguiente, disminuir el déficit fiscal.

Sin embargo, hay quienes están a favor y en contra de esta medida, puesto que presenta un efecto en el consumo de las familias, ya que reduce la capacidad de compra de los ciudadanos. Asimismo, existe efectos sobre la producción y el empleo debido a la disminución del consumo que impacta dicha producción y provoca una disminución en la mano de obra. Por otra parte, existe un efecto de redistribución de la renta, quienes se ven más impactados es la clase social menos favorecida, los que se encuentran en condición de pobreza. Esta decisión presenta un costo de oportunidad muy alto, que el país tomo para enfrentar una de las debilidades estructurales más preocupantes y una de las razonas por las cuales se ha presentado un fuerte deterioro en el desempeño de nuestra economía.

 

MOXIE es el Canal de ULACIT (www.ulacit.ac.cr), producido por y para los estudiantes universitarios, en alianza con el medio periodístico independiente Delfino.cr, con el propósito de brindarles un espacio para generar y difundir sus ideas.  Se llama Moxie - que en inglés urbano significa tener la capacidad de enfrentar las dificultades con inteligencia, audacia y valentía - en honor a nuestros alumnos, cuyo “moxie” los caracteriza.

Referencias bibliográficas:
  • Banco Central de Costa Rica. (2019). Revisión del Programa Marcoeconómico 2019-2020. San José, Costa Rica.
    Cuadrado, J. R. (2010). Política Económica. Elaboración, Objetivos e Instrumentos. Madrid, España: Mcgraw-Hill/Interamericana de España, S. L.
  • Grupo Camacho Internacional. (2019). Resumen del proyecto de Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas. https://www.grupocamacho.com/reformafiscal/resumen-del-proyecto-de-ley-de-fortalecimiento-de-las-finanzas-publicas-proyecto-20-580-que-cambia/