Por Luana Salas Marín – Estudiante de la carrera de Publicidad

Para nadie es un secreto que toda rama de la comunicación ha llegado a tener una gran sacudida por la era digital. Las Relaciones Públicas Digitales (PiaR digital) se han llegado a enfrentar en este buen reto y se han visto obligadas a cambiar su manera de generar estrategias; han tenido que acostumbrarse a las buenas herramientas de comunicación digital. En este contexto, se ha escuchado hablar de los influencers y el impacto que han generado en las relaciones públicas.

La gran pregunta es ¿quiénes son los influencers? Son personas reconocidas, nacional o internacionalmente, a través de las redes sociales, más que todo Instagram, puesto que es la aplicación donde hay más comunicación y son muchísimas personas las que usan esta plataforma para amplificar su influencia, fuerza y visibilidad. Los influencers suelen tener un alto nivel de credibilidad, un gran carisma y una forma de ser muy agradable, por lo que alcanzan a dar alguna opinión o idea sobre algún tema. Llegan a generar un tipo de “confianza” cuando hablan de algún producto o marca, y las personas prefieren escuchar sus opiniones antes de comprar algún producto. Algunos influencers costarricenses son Kurt Dyer, Fabián Mora, Valeria Sibaja, Fer Morera, Nane Miller, Karla Avilés, Jalé Berahimi, Coché Romano, entro otros más.

Actualmente, es muy común que las agencias de comunicación estratégica y relaciones públicas usen la estrategia de los influencers, ya sea porque las marcas lo desean o porque nosotros comprendemos que sería una buena estrategia trabajar con ellos. Sin embargo, esto tiene sus ventajas como sus desventajas, por eso hay que saber con quiénes se trabajaría y con qué lo pondríamos a trabajar.

El uso de los influencers puede generar mayor conocimiento sobre la marca o producto, más clientes, y seguridad a los futuros consumidores. Pero la pregunta aquí es ¿cómo sé cuál influencer es el mejor para mí? Primero que todo, tengo que saber cuál es mi objetivo en esta campaña, tengo que ver a cuál público específico quiero llegar; posterior a esto, busco cuál influencer tiene este público y si también las características de este influencer empatan con los valores que deseamos transmitir. Al escogerlo, hay que estar al tanto con lo que dirá de esto frente a sus conocidos followers, si será positivo o negativo.

Algo muy importante es saber cuál influencer usar para la estrategia, ya que puede que no sea creíble lo que esté diciendo. Por ejemplo, es como que escojamos a YoSoyPollo para que hable de la marca “THE CLAY” para el cuidado de la piel, ya que no está nada cerca el público meta nuestro.

La duda que surge mucho es si les decimos a los influencers lo que tienen que decir exactamente, pero no, porque no es publicidad y es mejor que hable naturalmente con lo que él/ella piensa del producto. De esta forma, crea un mensaje que pueda hacer impactante, real y así los futuros consumidores se sentirán más seguros.

El influencer tiene una gran cantidad de seguidores que puede ser que tengan lo que estamos deseando impactar, pero la tendencia del 2018 es trabajar con micro-influencers, puesto que ellos puede que tengan menos seguidores, pero puede que sean más específicos y con más confiabilidad.

Una de las estrategias que han hecho con los influencers es con Kary Ramos. Ella ha hablado en Instagram de cómo ha cuidado su cara, ya que la tenía reseca, tenía muchas ojeras, y habla de la marca “THE CLAY”. Dice que es una marca muy buena y ella la recomienda, ya que es una marca muy reconocida, con materiales orgánicos y para ella ha funcionado, entonces se los recomienda a sus seguidores.
En conclusión, las estrategias de los influencers, para las marcas, productos, empresas que deseen ser más conocidos, tener más consumidores, mejor posicionamiento de la marca, es una muy buena táctica. Sin embargo, hay que saber con quién hacerla. Por tanto, los relacionistas públicos deben estar muy atentos a ellos e investigar bien para saber cuál es el mejor para su marca.

 

MOXIE es el Canal de ULACIT (www.ulacit.ac.cr), producido por y para los estudiantes universitarios, en alianza con el medio periodístico independiente Delfino.cr, con el propósito de brindarles un espacio para generar y difundir sus ideas.  Se llama Moxie - que en inglés urbano significa tener la capacidad de enfrentar las dificultades con inteligencia, audacia y valentía - en honor a nuestros alumnos, cuyo “moxie” los caracteriza.