En la actualidad solo se gestiona correctamente el 8% de estos desechos.
El pasado 12 de octubre, Costa Rica inició el proceso para definir las metas de la recolección de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE), aplicando la Ley 8839 de Gestión Integral de Residuos y su planteamiento sobre la Responsabilidad Extendida del Productor (REP).
Las autoridades del Ministerio de Salud, en conjunto con el Comité Ejecutivo para la Gestión Integral de los RAEE (CEGIRE), son los encargados de hacer avanzar la recolección gradual a los importadores y productores de este tipo de residuo, quienes deben estar organizados en las ‘Unidades de Cumplimiento’, las cuales son una estructura legal conformada por uno o más productores o importadores de artículos eléctricos y electrónicos.
La ley establece que quién ejerza la producción o importación de estas mercancías es responsable de estas hasta luego de su vida útil; cuando se convierten en residuos.
Las empresas dedicadas al tema también deben brindar a los consumidores facilidades para la recuperación y gestión siguiendo las prácticas para la protección de salud pública y el ambiente.
Según el Jefe de la Unidad Salud Ambiental, Ricardo Morales, el desarrollo de esta normativa para los residuos de manejo especial es uno de los imperativos a cumplir para mejorar los sistemas de gestión de residuos y combatir los grandes problemas de contaminación terrestre y marina, así como proteger la salud de las personas.
Morales señaló a Delfino.cr que:
El proyecto de metas nace de varias consideraciones, una es porque vemos un mal manejo en algunos gestores de residuos, la otra es porque ya está la regulación sobre el reglamento de residuos electrónicos, tan bien se ve qué mayor interés en la población y en los importadores de sumarse en esta iniciativa”
Para establecer los volúmenes de RAEE a recuperar, el programa contó con el apoyo técnico del Proyecto de Residuos Electrónicos en América Latina (PREAL) donde se tomaron en cuenta múltiples variables, entre ellas, aspectos de viabilidad técnica, económica y operativa.
Además, en aspectos económicos, el aprovechamiento de los materiales de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, conocido como Minería Urbana, podría ser utilizado como una alternativa para la reactivación económica y generación de empleos, ya que como lo señala el Monitoreo Regional de Residuos Eléctricos y Electrónicos para América Latina 2022, la valorización de RAEE representa un total de US$1,7 mil millones para los 13 países analizados, y considerando a Costa Rica, el país tendría una oportunidad aproximada de US$87 millones.
Al respecto, el director de Protección Radiológica y Salud Ambiental del Ministerio de Salud, Eugenio Androvetto, señaló que:
Actualmente, la mayor parte de esta materia prima se pierde en los rellenos sanitarios porque la disponemos con los residuos ordinarios de gestión municipal o es manejada de forma precaria o con tecnologías y prácticas deficientes, algunas en manos del sector informal, y se genera un riesgo para la salud de esos trabajadores y nosotros mismos, pues muchos de esos componentes son tóxicos y requieren manipulación especial”.
Responsabilidad compartida y economía circular
De acuerdo con Androvetto, los productores e importadores de estos aparatos, junto a las unidades de cumplimiento, necesitarán hacer una inversión que había estado siendo pospuesta desde el 2014 con la reglamentación de la Ley de Gestión Integral de Residuos 8839, esto a fin de que las personas consumidoras tengan la posibilidad práctica y reciban un servicio para entregar adecuadamente sus residuos de aparatos eléctricos y electrónicos con la participación de los puntos de venta o en áreas específicas, a costo cero como dice la ley.
Lo mismo debe extenderse a los municipios para que integren RAEE en sus planes de gestión de cada cantón como un servicio a sus ciudadanos en alianza con los productores e importadores.
En el 2020, se estimó que el país generó alrededor de 68,000 toneladas, la mayoría son los aparatos pequeños, electrodomésticos que utilizamos y se generan como RAEE en nuestros hogares y solo el 9% es de computadoras, mouses y celulares, como se muestra en siguiente gráfica:
En la actualidad solo se gestiona correctamente el 8% de los RAEE. Es por lo que los RAEE deberán recuperarse de forma gradual y progresiva, en una primera etapa de 5 años.
Los aparatos eléctricos y electrónicos se convierten en uno de los residuos más complejos para tratar, debido a su composición con más de 70 distintos materiales que pueden contener elementos tóxicos tanto para el ambiente como para la salud humana.
Por esta razón es que el Ministerio de Salud les solicita a las personas entregar este tipo de residuos en campañas autorizadas o en centros autorizados.
La visión de las autoridades es que, en un horizonte de 20 años, el país esté recuperando y gestionando adecuadamente el 50% de sus residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, periodo en el cual se consoliden los procesos de economía circular en el país, para evitar la generación de residuos y mejorar la eficiencia en la producción, aprovechamiento de materiales y educación de los usuarios.