La empresa multinacional Microsoft realizó, esta semana, una serie de recomendaciones para que los gobiernos del mundo puedan agilizar su prestación de servicios a los ciudadanos, a partir de la transformación digital de sus procesos.

Según señaló en una entrevista el Cloud Lead para LATAM Central en Microsoft, Erick Sosa, el objetivo es que, gracias a la adopción de la tecnología, los gobiernos tengan la capacidad de mejorar la eficiencia en sus procesos, cuenten con la información necesaria para tomar mejores decisiones y diseñar políticas públicas más pertinentes. A su vez, los ciudadanos obtienen servicios más ágiles, más cercanía con el Estado y una mayor transparencia.

Esta apuesta en tecnologías como inteligencia artificial o machine learning permiten, entre otras cosas, ampliar el acceso e inclusión para la ciudadanía, evitar la repetición de un mismo trámite, reducir los tiempos de respuesta a la población, generar un mayor control sobre las gestiones públicas y ampliar los canales de contacto con el Estado.

Al respecto, Sosa detalló que:

Cuando hablamos de gobiernos digitales, hablamos de aquellos que toman las ventajas de tecnología disponible, trasladan esos beneficios de los procesos internos y prestan un mejor servicio al ciudadano. La nube ha sido clave para acelerar esta transformación, porque ha nivelado el acceso a estas tecnologías de punta para el sector público: permite acceder a esta infraestructura rápidamente y por un costo mucho menor. Se pueden aprovechar los modelos estadísticos matemáticos que ya están disponibles sin tener que desarrollarlos desde cero. No necesitamos reinventar la rueda y desarrollar un modelo de reconocimiento facial, por ejemplo, sino tomar los servicios disponibles que ya existen en las librerías nube”. 

A continuación les compartimos toda la entrevista:

Para el especialista, esto es un ganar-ganar, ya que con la digitalización estatal las organizaciones gubernamentales serían más eficientes y con menores costos en sus operaciones, además de que pondrían fin a procesos manuales repetitivos.

Además, tendrían la posibilidad de crear políticas públicas más pertinentes basadas en información real y actualizada, con servicios más ágiles y sin colas para la ciudadanía, lo que desencadenaría en una relación gobierno-ciudadanos "con más transparencia, más cercanía y capacidad de seguimiento y fiscalización".