La reconocida observadora de tendencias estadounidense Marian Salzman, quien es autora del libro "Las 22 Tendencias para 2022", brindó una conferencia internacional sobre el contexto mundial antes de iniciar el año 2022. En este conversatorio aclaró que los pronósticos para el próximo no son reconfortantes, pero brindarán ciertos destellos de esperanza.
Tras casi dos años inmersos en una pandemia mundial con un impacto muy negativo y un panorama sociopolítico fracturado, es muy complicado esperar una evaluación prometedora del futuro. A sabiendas de esta realidad, Marian teje una narrativa de predicciones que ofrecen un mapa de ruta para adentrarnos en lo que "podemos esperar".
A continuación iremos resumiendo lo que Salzman abordó en cada punto:
Cómo trabajamos
A medida que las oficinas vuelven a abrir y las empresas recuperan su rumbo, las personas se encuentran evaluando lo que quieren de su trabajo, y qué tanto están dispuestos a aguantar. Eso significa que se espera más de las empresas, no solo salarios justos sino iniciativas y compromisos de diversidad, igualdad e inclusión real.
Por el otro lado, las empresas están calculando los riegos y beneficios de tener un sistema de trabajo híbrido (combinando trabajo remoto con presencial) y buscando mejores formas de capacitar a la fuerza laboral de forma rápida y rentable. Salzman prevé el surgimiento de “agentes de cohesión”, especialistas internos y tercerizados con la tarea de unir un equipo de trabajo trabajando a distancia de manera significativa.
El mundo también tiene una nueva perspectiva de los trabajadores antes menospreciados con cargos mal definidos como: trabajadores de primera línea y esenciales. Desde las enfermeras que mantienen los hospitales operando, pasando por los cajeros de los supermercados y quienes trabajan en cuidado infantil, el cómo cuidamos y mantenemos a estos trabajadores se encuentra en el centro de un debate cada vez más urgente.
Dónde existimos
Cada vez más aspectos de nuestras vidas se están tornando digitales. Dieciocho meses de confinamiento y restricciones por la pandemia han llevado a la educación en línea de una opción a una necesidad, resultando en preguntas como cuál es realmente el mejor modelo de aprendizaje.
Salzman dibuja las líneas de batalla que se están estableciendo contra las llamadas Big Tech y las redes sociales, poniendo la atención en nuevas tecnologías que se están volviendo populares, como la tecnología genética y criptomonedas.
Dónde vivimos
La forma de vida hiperlocal se siente más atractiva que nunca y cada vez más se tornará en ciudades de 15 minutos donde todo lo que un residente necesita puede ser obtenido dentro de un perímetro de 15 minutos caminando o en bicicleta (Seúl busca recortar cinco minutos de ese tiempo).
La vieja tendencia de urbanización no se reversará por completo, pero el trabajo remoto significa que veremos a segmentos de la población migrar a lugares más verdes y menos densamente poblados –en especial aquellos que ofrecen un fácil acceso a las comodidades y centros de transporte de las grandes ciudades–.
La ciencia como el salvador y el sospechoso
La aversión a las vacunas no es nada nuevo, pero la politización de la ciencia ha alcanzado un punto que amenaza con entorpecer el progreso y es casi una certeza que está contribuyendo a la mortalidad del COVID-19. A medida que surjan nuevas tecnologías de punta como la edición de genomas, que eleva el potencial para crear una raza genéticamente superior mejorada, los miedos a estos avances serán aún más divisorios.
Salud mental y bienestar
Con el alza en tasas de abuso de sustancias, alcoholismo y comportamientos suicidas, las autoridades de salud han prendido la alarma sobre “enfermedades de desesperación”. La sensación de temor que tantos sienten sólo ha empeorado durante la pandemia gracias al confinamiento obligatorio, el deterioro del tejido social, y la continua pérdida de la confianza en nuestros líderes y expertos.
Salzman identifica este como el momento adecuado para adoptar programas, herramientas y tecnologías que aborden los problemas de salud mental y ayuden a mejorar la sensación de bienestar general. Cada vez más estas herramientas serán incluidas en artículos de poner con el fin de monitorear y contribuir a nuestra salud mental y física.
Inequidad y desigualdad
En todos los ámbitos de nuestras vidas personales y profesionales, las personas están examinando con más detalle la conexión entre privilegio y oportunidad, algo que ha sido forzado ante el ojo público durante la pandemia. Desde oportunidad económica a seguridad personal, al impacto del cambio climático, ha sido imposible ignorar que algunos individuos, países y comunidades son más vulnerables que otros.
El centro solitario
En estos tiempos polarizados, la ideologías de “medio” y “centro” ha tenido una mala reputación. La mayoría de la gente probablemente tienda a visiones centristas en muchos aspectos, pero no son quienes están estableciendo agendas o apareciendo en las noticias.
Conclusiones un tanto esperanzadoras
Las economías están llenas de demanda acumulada que podría resultar en la versión del siglo XXI de los Felices años 20. En tiempos de polarización general y mentalidad de uno o lo otro, traer una visión “híbrida” ofrece una oportunidad para dar rienda suelta a los impulsos creativos y compromisos que puede que finalmente nos muevan hacia adelante.
La angustia está para quedarse. Debemos recalibrar nuestras expectativas. Tantas cosas que habíamos idealizado han demostrado ser lejos de perfectas, o simplemente ya no son relevantes, viables o sostenibles. Sin embargo, al verlo en general el informe de las 22 tendencias para 2022 de Marian Salzman ofrece un destello de esperanza de que podemos alcanzar un nivel de pragmatismo que nos lleve por nuevos caminos para abordar nuestros retos compartidos.
Si usted gusta leer las 22 tendencias para 2022 completas, visite MarianSalzman.com.
