El Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (Inciensa) confirmó este domingo la detección del primer caso de variante Ómicron de SARS-CoV-2 en Costa Rica.

Se trata de un menor de edad de 8 años, costarricense, a quien se le tomó la muestra en un hospital privado y fue remitida al Inciensa para vigilancia genómica. El paciente presentó fiebre, dolor de cuerpo y malestar general, actualmente se encuentra estable y realiza aislamiento en su casa de habitación en la provincia de San José.

Según informó el Ministerio de Salud, preliminarmente se maneja la información de un antecedente de viaje familiar la primera semana de diciembre a los Estados Unidos. El menor es contacto estrecho de casos positivos de sus familiares, y Salud ya trabaja en el rastreo epidemiológico del caso y sus contactos.

La muestra ingresó a Inciensa el 14 de diciembre, se tamizó el 15 y la secuencia genómica estuvo disponible este domingo.

El Ejecutivo indicó que este hallazgo no implica cambios en las medidas vigentes e hizo un llamado a la población a redoblar el cumplimiento de protocolos de autocuidado: espacios ventilados, uso correcto de la mascarilla, lavado de manos y completar los esquemas de vacunación contra COVID-19, incluso aprovechando las terceras dosis disponibles para mayores de 65 años.