Así como lo lee, usted todavía podrá marcar “no me gusta” en el video, pero el resto del mundo no lo sabrá. En adelante, solamente la cuenta que subió el video podrá ver la cantidad de votos negativos que recibió, pues el número se ocultará a los visitantes.
La medida busca reducir los “ataques de no me gusta” que se reportaban en la plataforma. Es decir, intentos de sabotear cuentas a partir de valoraciones negativas coordinadas por agrupaciones con el fin de afectar la reputación y el alcance de la cuenta atacada. Un ejemplo clásico es el del tráiler de Call of Duty: Infinite Warfare; los fans de la franquicia lo atacaron a punta de “dislikes” en 2016 como parte de una protesta organizada que consiguió impulsar al video al poco amable título del más “no gustado” de la historia (título que por supuesto, fue solo temporal).
YouTube explicó que puso a prueba la idea a inicios del 2021 y tras revisar la data en julio pasado corroboró que sí daba el resultado esperado: ayudar a desincentivar este tipo de ataques. La plataforma aclaró que el botón de “no me gusta” se mantendrá activo, de modo tal que los usuarios podrán seguir usándolo para “educar” el algoritmo, de modo tal que se vayan afinando las recomendaciones personalizadas que ofrece el servicio.
El anuncio se hizo hoy en la propia plataforma, donde Matt Kovalakides, estratega de contenido de YouTube, explicó los motivos de la decisión en un video que, irónicamente, ya acumula más “no me gusta” que “me gusta”.
Dado que la decisión ya se tomó y es cuestión de días para que se incorpore a todo el sitio, pronto no será posible ver ese registro en este video... ni en ningún otro. El cambio ya se ha empezado a aplicar y su aplicación será gradual.