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Hasta Restauración arqueó la ceja
— “Es impresionante que después de tanto tiempo no hayamos visto lo peor” me dijo ayer un querido amigo que trabaja en Cuidados Intensivos. Los reportes, desde adentro, son agobiantes.
— Quizá a usted, como a mí, le ha llamado la atención que “todo el mundo se está contagiando”. Yo no soy una persona de muchas amistades y en este momento tengo tres amigos enfermos. Uno en Atenas, otro en Palmares, otra en Alajuela.
— Es, por supuesto, un criterio absolutamente informal para concluir lo que sea, pero está claro que todos tenemos una “alarma interna” que se activa cuando sentimos el virus más cerca. En toda la pandemia nunca lo sentí tan próximo.
— Naturalmente, los números que manejan las autoridades validan esa “percepción”, no por nada les recordé que la semana pasada, a nivel de contagios, fue la segunda peor de toda la pandemia. Ese dato sin entrar a discutir que este país, a estas alturas, todavía no fue capaz de resolver cómo realizar más prue...