La Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) y la Universidad Nacional (UNA) anunciaron esta semana el descubrimiento de una nueva especia endémica de árbol en Costa Rica, que será bautizado como "Plinia costaricensis", en honor al Bicentenario de la Independencia nacional.
El descubrimiento fue realizado a inicios de este año por el ingeniero forestal de la CNFL, Erick Hernández, quien es el encargado del control de vegetación en el sistema de distribución del proyecto Hidroeléctrico Balsa Inferior de la Compañía, mientras este realizaba sus labores cotidianas.
Según el funcionario, fue ahí donde observó un fruto que le pareció particular:
Parte del mantenimiento que se hace es podar los árboles que están próximos a las líneas eléctricas, con el fin de evitar interrupciones en el servicio eléctrico. Cuando iba por este sector me encontré este árbol particular que estaba con frutos, me llamó la atención porque nunca lo había visto, tomé una muestra y lo envié al Herbario Juvenal Valerio Rodríguez para que ellos me ayudaran a identificarlo”, señaló Hernández.
A partir de este momento, los investigadores Maynor Carranza Varela y Pablo Sánchez-Vindas, de la Universidad Nacional (UNA) se dieron a la tarea de identificar esta especie:
Iniciamos un proceso de consulta con los compañeros, en este caso con Pablo que es experto en Myrtaceaes, consultas en línea y herbarios a nivel de Mesoamérica, el Caribe y la Amazonía de manera que vayamos vislumbrando, cuál especie podría ser, porque suponemos en principio que es una especie conocida, pero tenemos que hacer el proceso de descarte en su totalidad”, afirmó Carranza.
Con base en las características de la planta, los investigadores se dieron cuenta de que es del género Plinia t según Sánchez:
En este caso tenemos la semilla dividida en dos cotiledones, es decir que es del género Plinia, hay más de 50 especies en América, todas hay que revisarlas, ahora que tenemos la posibilidad de hacerlo por internet, e incluso pedir algunos ejemplares”.
Así, y luego de varios meses de estudio, y tras descubrir que efectivamente se trataba de una especie nueva, se le asignó el nombre "Plinia costaricensis":
Comenzamos a buscar si existía una Plinia con nombre de Costa Rica, y como no existe, decidimos dedicársela al país en conmemoración de la celebración del bicentenario de su independencia (1821-2021) y por eso la llamamos Plinia costaricensis”.
Árbol similar al de mango
Los científicos señalaron que la floración de este árbol se da entre los meses de abril y de junio y que sus frutos se observan en los meses de julio y agosto.
Hasta el momento, esta es una especie endémica para el país, conocida únicamente en la localidad de Bajo Rodríguez en San Ramón, principalmente al margen del río Balsa, donde se ubica el Proyecto Hidroeléctrico Balsa inferior.
Sus frutos, además, son comestibles, y en su hábitat serían consumidos por zarigüeyas o zorros pelones, guatusas, saínos, ardillas, viuditas o tangaras azules, yigüirros, sargentos, y mariposas de diversas especies que se alimentan de frutos en descomposición.
Según Sánchez:
Este fruto tiene un sabor semejante al mango y es un fruto que tiene mucho potencial para que pronto esté en los mercados como su primo Plinia edulis de Brasil. Eso es lo que la UNA en conjunto con la CNFL van a investigar para buscar cómo fitomejorarlo y poderlo comercializar”.
Para la CNFL, este tipo de alianzas entre la academia y una empresa pública del Estado, permite "que se agregue valor a las actividades que desarrollan ambas instituciones".
Según señaló Roy Guzmán, director de Estrategia y desarrollo de negocio de la Compañía:
La CNFL desde que planificó la construcción de esta planta hidroeléctrica y otra plata que se denomina Daniel Gutiérrez que está aguas arriba en la cuenca del río Balsa, se planteó la necesidad de proteger los sectores aledaños a la cuenca con el fin primordial de proteger el recurso hídrico que es con el cual nosotros generamos energía eléctrica y que nos permite satisfacer la demanda de nuestros clientes. Con situaciones como la que se dio en esta ocasión que encontramos una especie endémica que de forma colaborativa con la Universidad Nacional logramos detectarla, documentarla e inscribirla como tal, nos permite darle a la sociedad no solamente la posibilidad de conocer una especie nueva de la cual ya los técnicos y profesionales se encargarán de ver la potencialidad de la misma, sino también poner a disposición de la sociedad costarricense a través de este tipo de investigaciones de la Universidad Nacional, el potencial que tiene esta zona de nuestro país y la protección de la misma por parte de la CNFL”.
Según el investigador de la UNA, Maynor Carranza, actualmente están trabajando en la publicación de dos nuevas especies en la misma zona y por eso se espera que este sitio se vuelva un punto importante para el descubrimiento de nuevas especies.