El presidente ejecutivo del Instituto Nacional de Seguros (INS), Róger Arias Agüero, presentó esta mañana su renuncia irrevocable al cargo, luego que el diario La Nación publicara que el jerarca de la empresa estatal se vacunó contra la COVID-19 en enero, en una jornada destinada a inmunizar al Benemérito Cuerpo de Bomberos de Costa Rica.

Arias presentó su carta de renuncia al presidente Carlos Alvarado Quesada y destacó en ella que, desde su nombramiento, se dedicó a fortalecer la posición de mercado y la contribución a la sociedad costarricense del INS, “brindando mayor capacidad de atención hospitalaria a la Caja Costarricense de Seguro Social, contribuyendo con seguros orientados a impulsar el arribo de turistas y aportando recursos para las personas afectadas”.

El ahora exfuncionario destacó que pese a la crisis económica mundial generada por la pandemia de la COVID-19, el Grupo INS cerró el 2020 con utilidades netas por $124,9 millones, lo que implicó un incremento del 22% frente al 2019; además, la utilidad del año pasado se convirtió en la más alta alcanzada por la empresa en toda su historia. 

Arias dijo que su renuncia se orienta exclusivamente a evitar que "un error personal y de buena fe" se convierta en un factor de distracción para el desarrollo de las tareas que aún deben implementarse en el INS y en el Benemérito Cuerpo de Bomberos, o afecte el trabajo de respuesta a la pandemia que realiza la Administración.

Junto a Róger Arias Agüero se vacunaron en enero, en jornada prevista para Bomberos, otros cinco altos funcionarios según publicó La Nación: la vicepresidenta de la Junta Directiva del INS, Laura Mora Camacho; y cuatro miembros del Consejo Directivo del Cuerpo de Bomberos: Wárner Rodríguez González, Moisés Valitutti Chavarría, Rónald Carballo Cascante y Juan Ignacio Mata Centeno.