La Junta Administrativa Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva) se encuentra realizando una contratación para alquilar una vivienda —a través del Sistema Integrado de Compras Públicas (Sicop)— para ser utilizada por un año por su gerente de desarrollo a. i., Edgar Villareal Ruiz, quien actualmente vive a más de 90 km de su lugar de trabajo y busca recibir el beneficio que otorga esa institución a sus altos puestos de gerencia por tener un Reglamento de Casas y Menaje.

Según consta en el procedimiento de contratación en Sicop, Japdeva busca que el inmueble a contratar tenga un costo máximo de 250.000 mensuales y el inmueble debe contar con sala, comedor, dos cuartos, un baño, parqueo para un vehículo y al menos entre 60 y 100 metros cuadrados de patio, y debe ubicarse en un radio de 25 kilómetros del denominado Puesto 1 de JAPDEVA en la Terminal Hernán Garrón en la ciudad de Limón.

Según señaló el propio gerente de Desarrollo al proveedor institucional para justificar la contratación, el alquiler de la casa "es fundamental, a fin de garantizar, durante su gestión, su estadía en el cantón central de la provincia de Limón, área en donde se encuentran las oficinas centrales de la Institución, situación que no ofrece el sistema hotelero, al no brindar una garantía real de espacio en situaciones imprevistas en las que el Gerente deba pernoctar en la ciudad. Además procura un espacio seguro y privado, que permite la discreción y confidencialidad que no ofrece un hotel, siendo este uno de los fines del espíritu de la emisión del reglamento".

Desde Delfino.cr consultamos a la presidenta Ejecutiva de Japdeva, Andrea Centeno Rodríguez, sobre los motivos de esta contratación y si, en medio de la crisis financiera que atraviesa la institución, se justifican estás erogaciones, a lo que Centeno contestó que desde 1995 JAPDEVA cuenta con un Reglamento de Casas y Menaje que permite brindar esta condición a los gerentes.

En el caso del gerente de Desarrollo para el que se está buscando alquilarle una casa, Centeno señaló que “en múltiples ocasiones sus horarios se extienden hasta avanzado el día o la noche fuera de los horarios normales de la jornada ordinaria, se ha considerado la necesidad de que pueda radicar el Limón centro para brindarle las condiciones en la labor que está realizando y llevando incluso a dedicaciones adicionales de tiempo. Las características buscadas de la vivienda son proporcionadas y el límite presupuestario razonable a ellas”.

Adicionalmente, Centeno aseguró que su administración es “totalmente consciente de las condiciones actuales y ello se evidencia en los esfuerzos que se han hecho para reducir los gastos en la institución registrando un ajuste de un 46% menos de gasto corriente en comparación al 2019 haciéndose cambios significativos en diferentes campos, muchos en los que han participado los gerentes quienes han dejado de lado condiciones con que contaban sus homólogos en el pasado también conscientes de las condiciones que afrontamos”.

Centeno, respaldó el compromiso de sus gerencias y aseguró que “estas posiciones no devengan viáticos (desde que ocupan el cargo), utilizan en la gran mayoría incluso para giras laborales sus propios vehículos sin costo para la institución cubren el costo de sus teléfonos —beneficio que antes se otorgaba—, los funcionarios atienden permanentemente labores fines de semana y cubren gastos de insumos inmediatos que se pueden requerir en la institución, entre otros elementos”.

Cuestionado Reglamento de Casas y Menaje

Desde el año 2000, la Contraloría General de la República le había indicado a Japdeva que la redacción del reglamento para Casas y Menajes “es bastante abierta, convirtiendo en regla lo que debería ser una excepción, es decir permitiendo prácticamente a todas las personas que se encuentran dentro de la clase gerencial gozar regularmente de una casa de habitación o menaje de casa, sin que se valore si esa medida se justifica dentro de los límites de la discrecionalidad, según criterios de razonabilidad, lógica, conveniencia”, y destacaba que ese reglamento “carece de condiciones mínimas y necesarias que deban cumplir los funcionarios descritos en ese artículo, para poder ser beneficiados con dicha asignación”.

Adicionalmente, desde ese momento la Contraloría recomendaba que lo pertinente para el tipo de casos incluidos en el reglamento era usar la figura de Zonaje como beneficio salarial, sin embargo, en Japdeva decidieron mantener la asignación del beneficio de casas y menaje.