La cadena de televisión estadounidense, CNN reveló este lunes en exclusiva que el gobierno de Estados Unidos se encuentra evaluando —desde la semana pasada— un informe de una "amenaza radiológica inminente" en un planta nuclear de China en la provincia de Guangdong.
El informe llegó a manos estadounidenses luego que la empresa francesa Framatome, propietaria y quien ayuda a operar la planta, advirtiera de una fuga radioactiva en la central de energía nuclear de Taishan.
CNN obtuvo una carta de la empresa al Departamento de Energía de Estados Unidos en el que se incluye una acusación de que la autoridad de seguridad china está elevando los límites aceptables de detección de radiación fuera de la planta, para evitar tener que cerrarla y reconocer la fuga.
Aunque de acuerdo con el medio estadounidense el gobierno de Biden cree que la planta aún no se encuentra en un "nivel de crisis", funcionarios consultados consideraron que es inusual que una empresa extranjera se acerque unilateralmente al gobierno de Estados Unidos en busca de ayuda, cuando su socio estatal chino aún no reconoce la existencia del problema.
"El escenario podría poner a EE.UU. en una situación complicada si la fuga continúa o se agrava sin ser reparada", destacó CNN.
Aunque el gobierno de Joe Biden aún no considera que la situación es significativa, fue lo suficiente como para que el Consejo de Seguridad Nacional (NSC) sostuviera múltiples reuniones desde la semana pasada para monitorear el incidente. Según CNN, esas reuniones incluyeron dos a nivel de adjunto y otra reunión a nivel de subsecretario el viernes, la cual fue dirigida por la directora senior del NSC para China, Laura Rosenberger, y la directora senior de Control de Armas, Mallory Stewart.
CNN afirmó que la administración de Biden ha discutido el tema con el gobierno de Francia y sus propios expertos en el Departamento de Energía. Asimismo, el gobierno estadounidense ha estado en contacto con el gobierno chino, aunque no está claro el alcance de ese contacto.
Hasta ahora el gobierno de Biden se ha negado a explicar la evaluación de riesgo. Sin embargo, las fuentes de CNN en el NSC, Departamento de Estado y Departamento de Energía insistieron en que si hay algún riesgo para el pueblo chino, Washington debe darlo a conocer en virtud de los tratados actuales relacionados con accidentes nucleares.
Framatome se contactó con Estados Unidos cuando China elevó los límites tolerables de radiación fuera de la planta, por encima de los límites franceses. La carta solicitaba una exención para que la planta pudiera compartir la asistencia técnica estadounidense para resolver el problema, algo que solo podría ocurrir por dos motivos, y uno de ellos es una "amenaza radiológica inminente", el mismo término utilizado en la carta de Framatome a Estados Unidos del 8 de junio, según CNN.
El medio estadounidense afirmó que Estados Unidos podría dar el permiso para brindar a la empresa la asistencia técnica o el apoyo necesario para solventar el problema, pero que la decisión en última instancia era del gobierno de China.
CNN afirmó que se comunicó con las autoridades chinas en Beijing y la provincia de Guangdong, donde se encuentra la planta, la embajada china en Washington, así como con el grupo energético estatal que opera la planta junto con la empresa francesa, pero que ninguno respondió a sus solicitudes de comentarios.
Framatore, sin embargo, sí le reconoció a CNN que está apoyando la resolución de "un problema de desempeño" en la planta de energía nuclear de Taishan. Y a diferencia de la carta enviada al gobierno estadounidense el 8 de junio, la empresa le dijo a CNN que "según los datos disponibles, la planta está operando dentro de los parámetros de seguridad".
La situación es una amenaza radiológica inminente para el sitio y para el público y Framatome solicita con urgencia permiso para transferir datos técnicos y asistencia según sea necesario para que la planta vuelva a funcionar con normalidad.
—Carta de Framatore al gobierno de Estados Unidos el 8 de junio.
Según el último informe al 30 de mayo, el reactor había alcanzado un nivel de radioactividad fuera de la planta al 90% del nuevo límite tolerable fijado por la autoridad china.
La planta de energía nuclear de Taishan se empezó a construir en 2009 luego que China firmara un acuerdo de generación de electricidad nuclear con Électricité de France, cuya propiedad mayoritaria recae en el gobierno de Francia. La planta empezó a generar electricidad en 2018 en la ciudad de 950.000 habitantes situada en el sureste de China y en la provincia que alberga 126 millones de habitantes.