• Estas acciones también reducen la huella ambiental de cualquier tipo de negocio.

La crisis ambiental que vive el planeta en conjunto con los cambios en el panorama social y económico generados por la pandemia de la COVID-19, provocó que el sector hotelero decidiera apostar por acciones cada vez más amigables con el ambiente, a fin de potenciar ese valor agregado para su clientela.

Métodos como el aprovechamiento de la luz y la ventilación natural, la instalación de paneles solares, la utilización de productos de alimentación orgánicos y la implementación de productos biodegradables son solo algunos de los procedimientos que se ha empezado a usar en los distintos hoteles del país.

Alonso Bermúdez, gerente general del Hotel Lagarta Lodge, ubicado en Nosara, Guanacaste, comentó que

Se cuenta con una red de 120 paneles solares con 5 inversores, para autoconsumo, distribuyendo en la red eléctrica del hotel en una capacidad del 70% a una producción de 2592 kWh”.

Este establecimiento también cuenta con un plan de gestión que describe la reutilización de aguas residuales para el riego, el uso de los restos de comida para alimentar a los cerdos de la zona y a la sustitución de servilletas y pajillas desechables por sus versiones de tela y bambú.

Por otra parte, en los hoteles que se ubican en zonas con un clima distinto se han implementado otras alternativas. Un ejemplo de esto es el El Silencio Lodge, hotel ubicado en Toro Amarillo y en el que las paredes poseen materiales para conservar el calor y reducir el consumo de energía o leña para calefacción.

Las habitaciones además fueron diseñadas con ventanales, esto para aprovechar la luz solar durante más horas del día y no depender de la iluminación eléctrica durante tantas horas.

Al respecto el gerente general del hotel, Frederic Capello, señaló que:

En relación a las medidas implementadas para el agua, el hotel utiliza en un 100% agua pura aprovechada de unas de los cientos de nacientes que existen en la propiedad. Esta se protege desde su captación con tapas y encierros y se termina de purificar con luz ultravioleta lo que permite no generar residuos de cloro u otros componentes, de esta forma la sensación es más natural y se contamina menos. Por supuesto el sistema cumple con todos los parámetros del Ministerio de Salud, además para el futuro se busca incorporar el acueducto al Sello de Calidad Sanitario del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados, para demostrar de nuevas formas la Sostenibilidad con este recurso natural tan valioso”.

Todas estas distintas acciones forman parte de un modelo llamado economía circular, que propone cambiar la manera en que se produce y consume, para alcanzar un crecimiento económico y potenciar el ciclo de vida de bienes, servicios y materiales