Hace dos años se me ocurrió empezar un podcast. Al principio, como suele pasar, la inspiración me dio muchísima motivación y energía y en cuestión de un par de semanas grabé 16 conversaciones con personas a las que genuinamente admiro. Luego, me senté horas de horas a editarlas para reducirlas a 24 minutos jugosos.
Y luego… nada.
De pronto, pasaron dos años. Y no puedo culpar por el retraso a la pandemia ni a mis viajes de trabajo. Excusas me sobraban, pero el meollo del asunto es que el qué dirán me aterra. O aún peor, que no dirán nada porque nadie lo va a escuchar.
Lo irónico es que el tema que exploré con todos mis invitados fue el de la vulnerabilidad y el de cuánto ganamos todos cuando tenemos el valor de dar el salto y permitirnos ser vulnerables… A la hora de la hora, cómo cuesta predicar con el ejemplo.
Brené Brown dice que la vulnerabilidad es "incertidumbre, riesgo y exposición emocional". Es esa sensación de inestabilidad que tenemos cuando salimos de nuestra zona de confort y hacemos algo que nos obliga a perder el control. Este podcast me enseñó muchísimo sobre eso a través de la experiencia de mi invitados, pero también a través de mis propios miedos e inseguridades. Delfino.cr me honra al darme la plataforma para compartirlos (¡gracias!), y hoy estoy muy emocionada de publicar el primero de ellos.
El primer podcast: Jose Chacón
Tengo muchos años de conocer a Jose. Al principio no me hacía mucha gracia porque es creyente y, peor, es pastor. Pero sin proponérselo ni haber hablado directamente conmigo, Jose me enseñó a ser más tolerante. A que las cosas no tienen que ser blanco y negro todo el tiempo. ¡Cuánto podríamos beneficiarnos como sociedad si entendiéramos eso, ahora que todo está tan polarizado y las redes sociales hierven con trolls beligerantes!
Hace más de una década, Jose fundó Interludio, una comunidad de fe abierta, inclusiva y tolerante, que evita a toda costa dar respuestas. Básicamente, es un lugar donde Jose facilita la reflexión sobre todo tipo de temas, muchas veces temas en los que normalmente la religión no se mete y que los ticos hemos jurado ignorar ad infinitum. Y claro, eso le ha generado muchísima resistencia a Jose, y yo creo que se necesita ser muy pero muy valiente para atreverse a seguir adelante.
Y esa es la vulnerabilidad de Jose. Él dice que sin vulnerabilidad no hay intimidad, porque la vulnerabilidad es presentarse tal como uno es. Es no tener miedo de ser uno mismo. Suena fácil, pero eso de exponerse a críticas y humillaciones por sencillamente ser quien uno es… puede doler mucho.
¿Y si me la pelo?
“Ese es el riesgo”, dice Jose. Ese es el riesgo de ponerse en frente de sus feligreses, pero también de tener conversaciones difíciles, de denunciar cosas que no están bien, o incluso de empezar un podcast. Pero Jose tiene muy claro cuál es su posición ante ese riesgo, él lo acepta porque “el miedo a la pregunta, es la primera cárcel”. ¿Y si me la pelo? Esa siempre es una posibilidad. Vulnerabilidad es dar el paso a pesar de ella.
Es interesante que normalmente escuchemos la palabra “vulnerabilidad” y pensemos en debilidad, dolor, hasta inferioridad. Si algo he aprendido es que la vulnerabilidad es todo lo contrario: es la valentía de lanzarse al vacío sin ninguna garantía de éxito. Es hacer de tripas corazón, y echar palante.
En este podcast Jose nos cuenta algunas historias personales muy íntimas para compartir lo que lo motivó a empezar su propio proyecto y los miedos y críticas que ha tenido que enfrentar. ¡Ojalá les guste y gracias por escuchar!
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