• El apoyo será en materia de género para atender casos de presuntas agresiones en el Colegio Calasanz.

A partir de denuncias públicas en redes sociales que señalan presuntas agresiones sexuales contra una exalumna del Colegio Calasanz, el INAMU solicitó conocer las acciones concretas del Ministerio de Educación Pública (MEP), para apoyar en la aplicación del protocolo de atención ante estos casos y dirigir estas denuncias a las instancias correspondientes con el fin de apoyar a las víctimas.

“El Ministerio de Educación Pública está llamado a garantizar la protección de la población estudiantil y su derecho a desenvolverse en ambientes seguros y libres de violencia”, enfatizó el Instituto en un oficio remitido a la entidad educativa, en el marco de las atribuciones que le confiere la ley al INAMU.

Estas atribuciones se refieren especialmente en lo que señala Sistema Nacional para la Atención y la Prevención de la Violencia contra las Mujeres y la Violencia Intrafamiliar, en la Ley 8688.  

En el oficio enviado el día de ayer al MEP, y firmado por Marcela Guerrero Campo, Ministra de Condición de la Mujer y Presidenta Ejecutiva del INAMU, se solicitó conocer las acciones que desde la Dirección de Educación Privada del MEP se están ejecutando.

Asimismo, el INAMU ofreció una reunión con el Departamento de Violencia para coordinar acciones y atender, de la manera más adecuada, esta y otras situaciones similares.

Según Guerrero:

Nuestra prioridad será siempre la defensa de los derechos de las mujeres y promover acciones para que nuestras niñas, adolescentes y mujeres en general puedan vivir libres de cualquier tipo de violencia y discriminación. Con ese norte tan claro hoy, respetuosamente, le solicitamos al Ministerio de Educación Pública que investigue los supuestos hechos ocurridos en el Colegio Calasanz”.

La causa 

El pasado 8 de marzo se hicieron públicas fotografías de carteles colgados en los baños de mujeres del Colegio Calasanz con la leyenda: “El Colegio Calasanz apoya y encubre a abusadores”.

Esto motivó a una exalumna de dicha institución a contar su experiencia de agresión sexual por parte de dos excompañeros y por la cual no recibió un apoyo satisfatorio por parte de las autoridades del colegio. Según la denuncia, los hechos habrían sucedido en el 2016, cuando cursaba décimo año.

En redes sociales, la joven de 21 años denunció presuntas presiones del anterior director del colegio y de las psicólogas del centro para evitar que interpusiera una denuncia en contra de los alumnos implicados.

En una carta enviada por los padres de la víctima al entonces director general, Héctor Sánchez, se señaló la falta de protocolos para atender situaciones de esta índole, ya que enfrentaron a la víctima cara a cara con su agresor:

De acuerdo con los procedimientos legales no se confronta a la víctima con el presunto victimario ni en esta ni en ninguna circunstancia y, tratándose de menores, no se puede hacer sin la presencia de sus respectivos padres o encargados”, señala la misiva firmada por sus padres y autenticada por una abogada.

Según una nota de La Nación publicada al respecto, el centro educativo aseguró que investigó los hechos y activó los protocolos de atención. Además, afirmaron que la decisión de no presentar una denuncia contra las personas implicadas fue tomada por la familia de la víctima.

Otros colegios afectados

El Colegio Calasanz no es la única institución educativa que ha enfrentado cuestionamientos casos de esta índole. Según una nota del diario tibaseño, en junio del 2020, alumnas y exalumnas del Colegio Claretiano también denunciaron supuestos abusos sexuales registrados en el centro educativo.

INAMU apoya cualquier proceso de denuncia, protocolo o asesoría para la atención de estos casos y otros tipos de violencia. Asimismo, recuerda a la ciudadanía la importancia de hacer las denuncias respectivas ante los entes y autoridades que correspondan", concluyó el instituto en su comunicado a la prensa.