El Corredor Biológico Interurbano María Aguilar (CBIMA) buscará convertirse en un modelo internacional de intervención y recuperación urbana, gracias a la participación del país en el programa de la Unión Europea INTERLACE.
El proyecto pretende transformar la infraestructura gris en verde y azul, lo cual beneficiará a unas 450 mil personas que viven en sus alrededores.
Este proyecto se anunció el miércoles 24 de marzo durante la instalación en Costa Rica del programa INTERLACE, en Dulce Nombre de Tres Ríos.
Según explicó Presidencia en un comunicado enviado a la prensa:
El trabajo se ejecutará de manera multisectorial, multinivel e intermunicipal, bajo el liderazgo del Instituto de Vivienda y Urbanismo (INVU), la Universidad Nacional, la Unión Nacional de Gobiernos Locales y las municipalidades de La Unión, Curridabat, Montes de Oca, San José y Alajuelita”.
El proyecto transformará la infraestructura gris en verde y azul a través de paredes y techos verdes, o bien, por medio de procesos de reforestación o recolección de agua llovida, para de esta forma, mejorar la interacción entre la ciudad y el ambiente.
INTERLACE es un programa de la Unión Europea cuyo objetivo es restaurar la naturaleza en ciudades de Europa y América Latina, utilizando soluciones que permitan resolver algunos de los retos relacionados con el cambio climático, la salud y el bienestar de las personas, el desarrollo económico y la conservación de la flora y la fauna”, agregó Presidencia.
Según agregó la coordinadora del proyecto INTERLACE, Sandra Naumann:
Las zonas urbanas de todo el mundo se enfrentan a retos como la expansión urbana, el cambio climático y la contaminación. Al participar en INTERLACE, CBIMA demostrará que la restauración de las zonas verdes y la aplicación de soluciones basadas en la naturaleza pueden ayudar a abordar los retos compartidos, a la vez que proporcionan beneficios más amplios para la sociedad, el medio ambiente y la economía”.
Debido a la Ley de Planificación Urbana, N° 4240, la cual le da potestades al INVU en materia de renovación urbana, la institución será parte del comité local seleccionado para participar en INTERLACE.
Gracias a esta ley, el INVU podrá realizar una serie de proyectos que serán financiados a través de la cooperación internacional que brinda la Unión Europea, cuyo nombres es Fondos Horizonte 2020. Es de esta manera que se podrá realizar el proyecto del corredor biológico, el cual cubrirá una extensión de 3956,78 hectáreas, con una área urbana del 71%.
Según Erick Solano Coto, Presidente Ejecutivo del INVU:
El proyecto ejecuta un plan de renovación urbana que incorpora, de manera integral, el componente ambiental, de modo tal que se pueda garantizar la recuperación de espacios verdes en zonas urbanas, lo cual a su vez se traduce en mejores condiciones del entorno y calidad de vida para los habitantes de la región”.
Este proyecto permite vislumbrar los efectos positivos de un trabajo que se realiza con la participación coordinada de diversos actores que han sumado esfuerzos junto con las comunidades para lograr un cambio en los modelos de gestión del espacio público y el aprovechamiento de los recursos naturales”, agregó Solano.
El objetivo también es que INTERLACE brinde una oportunidad para que las autoridades municipales, los ciudadanos oriundos de las zonas tratadas, las organizaciones y las empresas trabajen juntos para crear una comunidad más verde.
El proyecto cuenta con la participación de 21 organizaciones de reconocida labor en pro de la sostenibilidad.