• La implementación de estas iniciativas beneficia directamente a 30 asociados y sus familias, e indirectamente a unas 150 personas de las comunidades de Níspero, Cañas, Abangares y Colorado, entre otros.

Cuatro comunidades pesqueras del Golfo de Nicoya cuentan con el equipamiento necesario para hacer despegar sus negocios de nuevo, tras el duro golpe a la economía local causado por la pandemia de la COVID-19.

En total, 30 integrantes de la Asociación Comité Local de Pescadores de Puerto Níspero de Cañas, Guanacaste, pertenecientes al Territorio Rural Abangares-Cañas-Bagaces-Tilarán, fueron beneficiarios con la Estrategia Motor Rural, específicamente con los programas Impulso Rural y Crédito en Marcha del Instituto de Desarrollo Rural (Inder).

Según el INDER, la implementación de estas iniciativas indirectamente a unas 150 personas de las comunidades de Níspero, Cañas, Abangares, Colorado, entre otros.

Con Impulso Rural, la organización pudo adquirir equipo de pescadería como trasmallos y una máquina escarchadora para hacer hielo, con una inversión de ₡5 millones de recursos no reembolsables.

El grupo accedió al Crédito en Marcha, el cual estaba dirigido a organizaciones del sector agropecuario con un 2% de interés fijo anual a 5 años plazo. Mediante este servicio obtuvieron ₡10 millones, para la compra de 10 motores fuera de borda en beneficio de los asociados.

Además, mediante una alianza entre la Fundación MarViva y el Conglomerado Financiero Banco Nacional, esta semana se entregaron los implementos necesarios para el equipamiento de tres recibidores de productos pesquero. También fueron otorgados equipos y mobiliario para la remodelación de las instalaciones del restaurante El Pescador, también ubicado en esa comunidad nicoyana.

Las entidades realizaron una inversión en equipos por un monto superior a los 20 millones de colones.

El presidente de la Asociación de Pescadores Artesanales de Colorado, Enoc Rizo, declaró que:

Con la llegada de este equipamiento, nuestra organización tiene la esperanza de mejorar la calidad de los productos para nuestros clientes y consolidar el sistema de comercialización que implementamos para hacer frente a la necesidad económica que trajo la pandemia”.

Níspero es una comunidad con un marcado desempleo y la única fuente de empleo es la pesca que realizan en el Golfo de Nicoya y en ocasiones los pobladores trabajan como peones agrícolas en la actividad melonera.