El pasado 15 de enero, y contra viendo marea y pandemia, la artista costarricense Natalia Morales Rojas, estrenó en Barcelona, España, su nueva exposición Top Down – Bottom Up, una obra que nos invita a cuestionar nuestras concepciones de apropiación espacial, a fin de imaginar y replantearnos nuevas formas de distribuir los espacios urbanos y reapropiarnos así de los territorios.

Morales Rojas, con quien Delfino.cr conversó la semana anterior para ampliar sobre su trabajo, es graduada de Bellas Artes con el énfasis en Diseño Ambiental, en La Universidad Nacional (UNA) y tras finalizar sus estudios en el país, viajó a Europa para cursar el Master en Creación Artística Contemporánea, donde profundizó en cómo la cartografía ha influido en la relación humana con el espacio que le rodea y donde ha desarrollado su trabajo desde entonces.

Artista Natalia Morales Rojas

Esa inquietud es la que le llevó, hace tres años, a empezar el proyecto A Line Made By (o "Una línea hecha de"), a partir del cual Morales realiza activaciones en espacios urbanos que han sido producto de planificaciones urbanas fallidas por no haber pensado en el ciudadano. El objetivo es subvertir su función para detallar cómo proyectos que indicaban el camino a seguir, se han convertido en una maraña que no lleva a ninguna parte.

Esta labor es precisamente la que se plasma en Top down bottom up, una obra a partir de la cual la artista dibuja e interviene mapas cartográficos, uno sobre otro, para construir un atlas de todos los posibles mapamundis a los que podríamos enfrentarnos cuando tenemos delante un espacio urbano, con la intención de que el espectador disuelva los territorios y fronteras y los sustituya por espacios nuevos, más cercanos a su realidad.

Según nos comentó la artista, las distribuciones territoriales se realizan muchísimas veces priorizando intereses políticos, económicos y de otras índoles similares, antes que en las necesidades humanas y esa nueva concepción es la que busca replantear con su obra:

De ahí me estoy apartando de ese mapa utilitario para movilizarme hacia un escenario más imaginario en donde, nosotros hoy en el contexto que vivimos de ficción y realidad que no pensamos que pasara nunca, al final podemos hablar del territorio y de cómo nos estamos restringiendo en muchas cosas, no solo en nuestro cuerpo, sino que también en nuestras relaciones humanas que cambian como el territorio. Por eso mi objetivo es trabajar una cartografía distópica que promueve y que impulsa mi idea de utilizar el imaginario creativo de las personas para que el espectador sienta la necesidad de imaginar y emanciparse de lo establecido, perdiéndose un poco y permitiendo que el momento de inestabilidad e incertidumbre permita repensar y transformar el territorio".

Top down bottom up está presentándose actualmente en la galería barcelonesa Tangent Projects, donde estará disponible hasta el próximo 26 de febrero.

Exponer en pandemia y trascender fronteras

¿Cómo ha sido el proceso de crear y exponer una obra como esta en medio de un contexto pandémico tan complicado como el que lleva viviendo España desde el 2020?

Según Morales, esta nueva normalidad también le ha supuesto retos nuevos que le replantearon nuevamente su relación personal y artística con el espacio, lo cual ahora se plasma en su obra:

Me ha modificado mucho la forma de repensar el territorio. Yo trabajo en el espacio público y cuando nos confinaron que estuvimos prácticamente 4 meses sin salir de la casa, esos 4 meses estuve trabajando en esta obra y eso sí que es verdad que tuvo una influencia, pues no trabajar con la comunidad y colectivamente para mí ha sido un reto".

La artista relató que entre los principales cambios que ha traído la pandemia destacan la limitación del público que puede acceder a este, pues ahora es necesario realizar reservas por horario para ello; además, las restricciones en las que vive España en este momento imposibilitan que personas habitantes fuera de la comarca puedan cruzar de una hacia otra y eso ha limitado a que personas de otras provincias dentro de la misma España, no hayan podido acudir al espacio.

Estas limitaciones, si bien son problemas operativos, la exposición ha tratado de convertirlos en oportunidades para que su trabajo se conozca no solo en Barcelona sino también fuera de fronteras españolas.

Yo cuando planifico una exposición intento hacer unas dos o tres actividades en medio pero esto nos ha tenido en veremos porque no se puede ¿verdad? Pero en cada adversidad te reinventas o vas imaginándote alternativas para ir resolviendo en torno a esto de la pandemia y así seguimos en esta lucha".

Por eso la próxima semana vamos a desarrollar una visita guiada de la exposición en forma virtual y estamos ultimando detalles al respecto. Yo estaría encantada de que allá en Costa Rica me puedan ver y también que se generen ese tipo de diálogos por allá".

Para más información sobre esa visita guiada, los interesados pueden ingresar a las redes sociales de la galería y también a la página web de la artista donde encontrarán además, más información sobre su trabajo.