Se dice que toma 21 días en hacer algo repetidamente, o de una forma específica, para que se convierta en un hábito. Llevamos ya 10 meses en pandemia, eso son más de 300 días de vivir bajo nuevas reglas y de reinventar nuestra forma de consumo, en su mayoría, a través de plataformas digitales.

¿Podríamos decir que los hábitos de prácticamente toda la población mundial cambiaron para siempre? Creo que sí. Desde el ámbito de la comunicación y mercadeo, experimentamos virajes sumamente interesantes, a la luz de lo que la tecnología y análisis de datos puede decirnos hoy de cada usuario de Internet.

Sostengo que los hábitos de la humanidad entera cambiaron, pero el cómo depende de las particularidades culturales y geográficas en las que vive cada país, e inclusive cada ciudad. Así, la colocación de mensajes para dar a conocer marcas o vender productos es un trabajo cada vez más complejo, pero al mismo tiempo, más preciso. Son las herramientas de Performance Marketing o Mercadeo basado en resultados las que merecen toda la atención de los tomadores de decisión, así como sus presupuestos.

Mientras más información tenemos, se abren mejores oportunidades de conectar con ese usuario, pero también se intensifican los retos para no pasar desapercibidos en medio de tantos estímulos.

Podría afirmar que hay dos áreas que debemos convertir en una herramienta favorable y no un obstáculo en nuestro camino:

  1. Competencia. Ante la saturación de información que viven los usuarios hoy en día, se vuelve vital aparecer en las pantallas de aquellos que realmente conectarán con nuestro mensaje, de los que tienen interés en nuestros temas o bien una necesidad que podemos cubrirles.
  2. Monitoreo diario y medición constante. Generamos una enorme cantidad de data cada minuto, por eso debemos analizarla a esa misma velocidad y utilizarla para calibrar nuestra audiencia y estrategias.

No es la colocación solamente, sino ese proceso de medición y optimización de las estrategias que se hagan en los canales digitales, lo que resultará en mejores resultados por cada dólar invertido. Eficiencia, conversión, transformación… estos términos son el pan de cada día para cualquier profesional que trabaje en mercadeo.

Es vital que impulsemos la educación y actualización constante en el mundo empresarial, de manera que los líderes entiendan el impacto que las herramientas tecnológicas pueden tener para el crecimiento de su negocio.

Además, son muchas las áreas profesionales que están relacionadas, y, por ende, pueden beneficiarse de las oportunidades laborales que se van abriendo. Desde expertos en comunicación social, publicidad, relaciones públicas, e inclusive psicología, pueden optar por certificarse en el uso de diferentes plataformas.

La pandemia trajo aceleración digital, y la comunicación y el mercadeo se alinearon a las nuevas exigencias, es así como finalmente se evidenció aún más la tecnología como una herramienta que mide sus resultados y justifica con números de conversión sus acciones.

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