El Consejo Nacional de Personas con Discapacidad (Conapdis) solicitó al ministro de Salud (Daniel Salas Peraza) y al presidente ejecutivo de la Caja Costarricense de Seguro Social (Román Macaya Hayes) la inclusión de personas con discapacidad y quienes les brindan apoyos directos dentro de los grupos prioritarios en el proceso de vacunación contra la COVID-19.

Conapdis apela al marco ético establecido para la vacunación y reitera los principios de igualdad, dignidad de derechos, necesidad y equidad, como base para inclusión de las personas con discapacidad.

Basados en el artículo 25 de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, el Consejo señala que:

Es vital brindar alternativas sanitarias para que la vida de todas las personas, incluyendo en todos sus extremos a las personas con discapacidad, sea salvaguarda, en complemento con la integración de los servicios sociales".

Aunado al comunicado, la directora ejecutiva de Conapdis, Lizbeth Barrantes Arroyo, agregó:

Analizando los tres grupos prioritarios que ya han definido las propias autoridades, señalamos que la misma lógica debe cubrir a las personas con discapacidad, a quienes les brindan apoyos permanentes, ya sean familiares, personal de las residencias de larga estancia o personal institucional"

Conapdis envió a las autoridades de Salud y de la CCSS una propuesta que incluye potenciales medidas para poner a las personas con discapacidad en el centro de la atención sanitaria.

Este plan incluye, en primera instancia, vacunar a las 755 personas con discapacidad que residen en los 52 hogares de larga estancia y a las 388 personas trabajadoras que les atienden de manera permanente.

Posterior a este proceso, Conapdis propone incluir en este grupo a las personas con discapacidad que viven en sus propias casas, sumado a las personas que las asisten.

Según el Consejo, se le debe dar prioridad a estos grupos porque:

  • Las personas ciegas deben palpar el entorno para su movilidad.
  • Las personas sordas deben usar sus manos muy cerca de la cara para comunicarse en Lesco y la mascarilla les dificulta la posibilidad de leer los labios.
  • Las personas con discapacidad intelectual requieren mayores apoyos para que toleren el uso de la mascarilla y comprendan las demás medidas higiénicas.

En la actualidad, el Consejo Nacional de Personas con Discapacidad está a la espera de una respuesta por parte de la Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología.