La Fundación MarViva y Moody’s Foundation formalizaron un convenio en apoyo a la reactivación económica en comunidades pesqueras por medio de la innovación tecnológica para la comercialización de pescado marino.
El proyecto “Sostenibilidad ambiental y social para el desarrollo integral de la pesca artesanal en Costa Rica” beneficiará a 110 familias en el Golfo de Nicoya y Puntarenas, afectadas a raíz de la emergencia mundial generada por la pandemia de COVID-19.
La Gerente de Mercados Responsables de Fundación MarViva, Hellen Arroyo, indicó que la pesca artesanal es el principal medio de sustento en esas comunidades. Por tanto, la interrupción de las dinámicas de mercado ante la pandemia ha afectado severamente su fuente de ingreso dado el cierre parcial o total de sus clientes tradicionales, incluidos restaurantes, hoteles y distribuidores locales.
Los pescadores y centros de acopio de producto artesanal beneficiarios del proyecto garantizan prácticas de pesca que reducen el impacto humano sobre el ecosistema, como el uso de artes de pesca selectivos, el respeto a la talla mínima de madurez de las especies y zonas legales de pesca, la captura de especies no vulnerables y el acatamiento de los periodos de veda. Todas estas prácticas se registran mediante el sistema de trazabilidad de MarViva.
Este proyecto promoverá un modelo de negocio alternativo para la comercialización directa del producto hacia nuevos nichos de mercado mediante el desarrollo de una plataforma de comercio electrónico que conecte directamente a los pescadores con el consumidor final en Puntarenas, Guanacaste y la Gran Área Metropolitana”, señaló Arroyo.
Por medio de una nueva plataforma de comercialización del producto pesquero y el sistema de trazabilidad de MarViva, los compradores podrán conocer el origen, criterios de responsabilidad ambiental y condiciones de manejo del producto. Todos estos criterios respaldarán su decisión de consumo responsable.
Esta plataforma nos ayudará a reforzar el área de ventas ya que en estos momentos de emergencia hemos tenido que adaptarnos al cambio y reinventarnos en cuanto a ventas y entregas”, declaró el propietario del recibidor Camapez, en Costa Pájaros, Manrique Álvarez.
El proyecto es parte de las iniciativas de sensibilización impulsadas por MarViva, hacia decisiones informadas de compra y al acceso de los pescadores artesanales a incentivos de mercado para la consolidación del uso responsable de los recursos marinos y costeros.